Entorno

Francia acude a las urnas con el deporte en la agenda del día

París será sede de los Juegos Olímpicos en 2024, un evento que tiene un coste de 3.800 millones de euros y que servirá para mostrar la mejor versión de Francia. Además, el Gobierno galo aprobó una nueva ley del deporte. 

Francia acude a las urnas con el deporte en la agenda del día
Francia acude a las urnas con el deporte en la agenda del día
Los diputados aprobaron que las ligas profesionales puedan crear una empresa comercial para la comercialización y gestión de los derechos de explotación audiovisual.

M. T. / M. L-E.

8 abr 2022 - 05:00

Francia afronta el próximo domingo la primera vuelta de sus elecciones presidenciales. Y lo hace con el deporte en el centro de la agenda de Emmanuel Macron, actual presidente de Francia, ya que París será sede de los Juegos Olímpicos del 2 al 18 de agosto de 2024, un evento que tiene un coste de 3.800 millones de euros.

 

De hecho, Macron anunció antes de terminar 2021 la construcción de 500 pistas de balonmano, mil campos polideportivos, 500 pistas de baloncesto 3x3, 500 pistas de pádel, 500 skateparks y 200 polideportivos móviles. Y todo para hacer frente a unos Juegos Olímpicos que, pese a que ha reducido su presupuesto en comparación con Tokio 2020, supondrán una oportunidad de oro para mostrar la mejor versión de Francia.

 

Por otro lado, el año pasado, la Asamblea Nacional dio el visto bueno a una nueva ley del deporte en el país después de aprobar el proyecto legislativo de La República en Marcha (Lrem), el partido de Macron.

 

 

 

 

La ley incorporó principalmente medidas sobre la gobernanza de las federaciones deportivas, incluyendo aspectos como la paridad, la limitación a tres mandatos para el presidente o una ampliación de la obligación de transparencia. Además, consagró la plataforma, ya existente, destinada a luchar contra las apuestas ilegales e incluyó la creación de un dispositivo para luchar contra el streaming ilegal de los eventos deportivos. También se votó a favor de que los atletas puedan participar en los órganos de gobierno.

 

Además, los diputados aprobaron que las ligas profesionales puedan crear una empresa comercial para la comercialización y gestión de los derechos de explotación audiovisual. De hecho, gracias a esta nueva normativa, hace dos semanas los clubes de la Ligue-1 aprobaron la venta de una participación del 13% de su nueva filial comercial a CVC Capital Partners por 1.500 millones de euros, tomando el ejemplo de LaLiga.  

 

Por otro lado, el Gobierno aprobó en el año del Covid-19 ayudas por valor de 400 millones de euros al sector deportivo para paliar las consecuencias de la pandemia de coronavirus, mientras que el año pasado destinó 270 millones de euros para fomentar el deporte base.

 

 

 

 

Emmanuel Macron parte con ventaja, pero su principal adversaria, Marine Le Pen, ha acortado distancias las últimas semanas. Según la última encuesta publicada por Le Mondela candidata de Agrupación Nacional está sólo a cinco puntos por detrás del presidente, mientras que a principios de marzo les separaban 16 puntos.

 

El salto hacia delante de Le Pen ha coincidido con el inicio de la guerra en Ucrania. El partido de extrema derecha, que cuenta con deudas con entidades financieras rusas, ha centrado su campaña en el poder adquisitivo de los franceses y no ha entrado al plano internacional. También ha marcado distancias el candidato de extrema derecha Éric Zemmour, que se presenta por primera vez a las presidenciales francesas, aunque ambos políticos habían expresado admiración por Putin en el pasado.

 

Los que parece que se han bajado de la carrera son los partidos tradicionales, que engordan su fracaso de 2017. Las proyecciones dan un 2,5% a Anne Hidalgo, del Partido Socialista y alcaldesa de París, y menos de un 10% a Valérie Pécresse, de Los Republicanos. Por su parte, el candidato de la Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, lo coloca en torno al 15%.

 

La economía francesa, junto con las del resto de la zona euro, está lidiando con una alta inflación. El país registró una tasa de variación interanual del Índice de Precio de Consumo (IPC) del 4,5% en marzo, nueve décimas más que la variación interanual de febrero.

 

A pesar del encarecimiento de la cesta de la compra, Macron llega a las urnas con una economía en buena forma. El Producto Interior Bruto (PIB) recuperó el nivel anterior a la pandemia a finales de verano de 2021. En total, el pasado año la economía del país se expandió un 7%, frente a la caída del 7,9% de 2020. La tasa de paro se ha situado en torno al 7%, el nivel más bajo en quince años, y la subida de precios es inferior a la media europea. Aun así, la pérdida de poder adquisitivo de los franceses ha centrado gran parte de la batalla electoral.