Entorno

Escauriaza (Rfeg): “El golf es un gran producto de exportación para España”

El presidente de la federación de golf, Gonzaga Escauriaza, señala en una entrevista que “el principal problema del golf es el tiempo, no el dinero”, por lo que buscarán promover los campos cortos en los próximos años.

Escauriaza (Rfeg): “El golf es un gran producto de exportación para España”
Escauriaza (Rfeg): “El golf es un gran producto de exportación para España”

Guillermo G. Recio

31 may 2018 - 04:58

“Los campos de nueve hoyos están triunfando en todos los países, se está buscando solucionar el problema del tiempo”

 

 

Gonzaga Escauriaza es el presidente de la Real Federación Española de Golf (Rfeg) desde 2008. El dirigente bilbaíno realizó sus estudios de Ciencias Económicas y Empresariales en la Universidad de Deusto, mientras que en el aspecto deportivo fue campeón de España amateur en 1977 y subcampeón en 1978. Desde 2000 ocupaba el cargo de vicepresidente en la entidad española, aunque antes fue presidente de la Federación Europea de Golf. Ahora, Escauriaza aprovecha su asistencia al primer encuentro de la Asociación Española de Campos de Golf (Aecg), celebrado en Sevilla, para analizar con Palco23 los retos que tiene por delante el golf en España.

 

¿Cómo ha evolucionado la situación de este deporte en el país en los últimos años?

 

Pasamos una crisis grande por varios motivos. Uno, por la recesión económica, que a España le afectó muchísimo. Y otro, a nivel mundial, que tiene que ver con los cambios de hábitos de la sociedad. El golf empieza a ocupar mucho tiempo, los matrimonios trabajan los dos, y se hace difícil que haya una persona que diga que se va cinco horas al día a jugar al golf. Todo ello hizo que el golf se resintiese prácticamente en todo el mundo.

 

¿Goza de buena salud en la actualidad?

 

Ahora, la situación la veo con gente con más ánimo. Es de gran ayuda tener a tres jugadores españoles entre los veinte primeros del mundo y, además, siendo muy buenos jugadores y muy mediáticos; eso está dando un gran impulso al golf. Si a ello sumamos que justamente ahora Jon Rahm ha ganado Open de España, con un éxito de público con 50.000 personas, creo que está remontando. Pero yo diría que no debemos echar las campanas al vuelo, que no volvamos a hacer excesos y hagamos las cosas profesionalmente y con calma. Entonces, el golf crecerá.

 

 

 

 

¿Y en relación con los cambios de hábito?

 

Los campos de nueve hoyos están triunfando en todos los países, se está buscando solucionar el problema del tiempo, porque el problema del dinero no es real. En Sevilla está La Cartuja y realmente puedes encontrar lugares que te cueste lo mismo que jugar al pádel. El principal problema es el tiempo, no el dinero.

 

¿El dinero no es la principal barrera?

 

Nosotros lo único que hemos hecho es fomentar esas instalaciones pequeñas y al ser pequeñas pueden estar cerca de las ciudades. Es también el caso de Villanueva de la Serena, Alcázar de San Juan… eso implica que son campos cortos, que la instalación es muchísimo más baratos, el terreno es mucho más barato y fácil que un ayuntamiento lo conceda. Para el jugador neófito es más conveniente. Además, los jóvenes se pueden sentir más cómodos en estos campos más pequeños, y luego les entran ganas de pegar el drive y de pasar a campos largos. Además sirve de vivero para los campos de golf de 18 hoyos, y eso es una experiencia muy buena.

 

¿Es este el pilar sobre el que hacer crecer número licencias?

 

Es una parte importante, en los campos cortos se habrán hecho 80.000 jugadores. Otra fórmula es la Friend’s Cup; el golf en los colegios, aunque el periodo de maduración sea más largo que la Friend’s Cup, otro es la búsqueda de colectivos como asociaciones o grupos de otros deportes como el pádel.

 

 

 

 

¿Cree que eso es suficiente para que se produzca un punto de inflexión en la evolución de licencias en España?

 

Perdemos muchas y hacemos muchas. Nuestro mal está más en perder que en hacer, porque en el último año hicimos 17.000 licencias nuevas, pero perdimos la misma cantidad. De esas que perdemos, desde hace diez años, la mayoría se pierden de quinta categoría. Es decir, que los que dejan de jugar son a los que les cuesta más. La barrera de entrada no es económica sino de juego, de posibilidades.

 

¿Alguna solución?

 

Una de las formas es que jueguen desde el tee más adelantado, porque hay barrancos, lagos y otros obstáculos difíciles. Si se sale más adelantado, prácticamente desde la calle, entonces perderían siete bolas menos, tardarían 45 minutos menos, harían 15 golpes menos y entonces igual no abandonaban. Queremos hacer un campeonato de España de quinta categoría que se empiece en los clubes, que los ganadores accedan a una final regional y luego nacional. Pero hay que decirles a los campos que es obligatorio jugar desde el tee más adelantado.

 

Puede que esta medida no guste a los más puristas, ¿verdad?

 

Es mucho más divertido, juegas el diseño del hoyo, pero más fácil. La gente no quiere hacerlo porque estamos en una sociedad un poco machista y dice: “cómo voy a salir yo como si fuera una señora”. En el Centro Nacional de Golf hemos eliminado los colores, lo hemos traducido a 61, que son 6.100 metros, o 57, si tienes 5.700 metros. Sin que se vea que son rojas o no. Eso podría ayudarnos mucho a no perder federados.

 

Las licencias representan prácticamente la totalidad de los ingresos de la federación. ¿Cómo se trabaja para conseguir más dinero?

 

Está claro que son los patrocinios. Con Reale, por ejemplo, hemos creado un matrimonio estupendo y seguimos, porque el mercado de seguros es muy importante en el mundo del golf. El seguro nuestro, de los campos, etcétera. También tenemos, aunque con menos relevancia, a Mahou, Solán de Cabras y Avis, pero además de otros complementarios como Mercedes sólo para el Centro Nacional. Es algo que hay que seguir explotando.

El patrocinio sí que supone el principal motivo para celebrar un torneo del European Tour.

 

 

 

 

¿Cómo puede España volver a organizar hasta ocho campeonatos como antes de la crisis?

 

La realidad es que las comunidades autónomas lo pagaban prácticamente todo. Y no lo critico porque son quienes realmente tienen que pagarlo porque son quienes se benefician. Si hacemos un torneo en el PGA de Catalunya pues los próximos tres meses vendrán muchos franceses e ingleses a jugar a ese campo y quien se beneficia es España y la región donde se juega. Mallorca, Baleares, Castellón, Comunidad Valenciana… todas estas regiones invertían en golf, pero con la crisis y el endeudamiento tan grande de las administraciones se cayó y por eso ahora es más difícil tener torneos en España.

 

¿Es sostenible un evento como el Open de España en el que no hay patrocinador principal?

 

Este torneo ha sido una excepción gracias al European Tour, a la Federación Madrileña y a la Española. Ahora hay que trabajar para conseguir un patrocinador principal, pero no es fácil para España, ni para Italia ni Francia. Actualmente, no hay ninguna federación que pague el Open en ninguna parte del mundo, por eso estamos luchando para mantener el Open de España, porque pensamos que ha sido un éxito y lo puede seguir siendo. El reto es muy grande, encontrar patrocinadores. De los que se registraron para entrar gratuitamente, había 6.000 personas que no eran jugadores de golf. Eso tiene una gran riqueza porque son personas potenciales que han tenido algún interés por el golf, ya sea porque son deportistas o por curiosidad. Hay que trabajar con ellos.

 

¿Qué le pediría a la Nueva Ley del Deporte?

 

Es complicado porque hay muchos aspectos que hay que discutir, pero desde luego encuentro que el deporte se tiene que tener en cuenta al ser la identidad más importante que tiene España y probablemente la mejor marca de España. Son absolutamente insólitos los éxitos que tiene España para el presupuesto que dedica. Para el golf, creo que necesitaríamos rebajar el IVA, algo que nos haría más competitivos con países como Turquía. No queremos perder la calidad, pero si se nos rebaja el IVA podríamos ofrecer esa calidad a mejor precio. También hay que poner el foco en el agua, ya que aunque utilicemos agua reciclada, podríamos tener acuerdos para que en periodos de sequía nos den un poco más de agua para los greenes, que el golf sea un poquito más considerado. El golf es un gran producto de exportación para España, deja un valor añadido muy importante.