Entorno

Albert Tomás (RibéSalat): “El seguro por pandemia existía, pero el deporte nunca le dio valor”

El director del área de deportes del bróker de seguros desgrana las claves para entender cómo el Covid-19 puede modificar el rol de los seguros en una industria donde los atletas son el principal activo.

M.Menchén

16 abr 2020 - 04:58

Albert Tomás (RibéSalat): “El seguro por pandemia existía, pero el deporte nunca le dio valor”

 

 

Albert Tomás fue un trotamundos del fútbol español en su etapa como profesional. Tras formarse en el FC Barcelona, pasó entre otros por el Albacete Balompié, el Levante UD o el Vissel Kobe de Japón. Hoy, es el responsable del área de deportes del bróker de seguros y reaseguros RibéSalat, desde donde lidia estos días con el mar de dudas que hay en torno a las coberturas en un contexto incierto como el provocado por el Covid-19. 

 

Wimbledon lo vio claro y cobrará más de 100 millones tras pagar dos millones al año para cubrirse en situaciones como la actual, pero el Grand Slam era una rara avis. “Esta crisis le va a dar un giro a cualquier evento, porque hasta ahora nadie quería pagar la sobreprima de cubrir una pandemia”, avanza.

 

 

Pregunta: ¿El mercado de seguros para deportistas estaba preparado para una crisis como la actual?

Respuesta: Dentro de los deportistas, hay que diferenciar entre los que son profesionales y los que son amateurs. Los atletas que están en régimen de convenio profesional siguen con una cobertura en vigor porque no se les ha dado de baja, así que el problema está en el segundo segmento. Las federaciones autonómicas han tenido que ser proactivas para solicitar autorización a las aseguradoras para que mantuvieran las coberturas mientras entrenan en sus domicilios, porque muchas se habían paralizado. Nadie contempló el entrenamiento en el domicilio, y se ha tenido que ir caso a caso porque cualquier riesgo de lesión es un problema.

 

P.: ¿Cómo reaccionará el mercado de seguros a una temporada tan atípica?

R.: La cobertura en caso de pandemia ha existido siempre, pero no se contemplaba porque en las condiciones generales no le dábamos importancia ni valor. Nadie lo quería contratar. Cuando pasó el 11-S sucedió algo parecido, porque entonces nadie tenía seguro de cancelación de eventos por terrorismo, porque era algo que veíamos en televisión, pero no pensábamos que llegaría al centro de Europa. Con la pandemia pasa igual, tenemos coberturas de accidentes para equipos profesionales que cubren cualquier caso y otras de accidente, pero eso no cubre una situación como la del coronavirus. Esta crisis le va a dar un giro a cualquier evento, porque hasta ahora nadie quería pagar la sobreprima de cubrir una pandemia porque nadie valoraba el riesgo de algo que no había sucedido desde la fiebre de 1918. Ha cogido a todo el mundo con el pie cambiado.

 

 

 

 

P.: ¿Qué cambios cree que se producirán a raíz de esta crisis?

R.: Una de las coberturas más sensibles en los deportistas de élite son los jugadores, y tú cubres de dos maneras: póliza de vida, que cubre cualquier causa, y el riesgo de que tengan accidentes. Esto va a cambiar, todo el mundo será más sensible la cobertura de pandemias, para cubrirse de otros virus que puedan aparecer y extenderlo a situaciones como la del atleta entrenando en un lugar que no es el habitual.

 

P.: ¿Difiere mucho la situación de un atleta individual, como el tenista, al de uno que forma parte de un equipo?

R.: El concepto de deportista profesional es diferente al del que gana dinero. En España, un 90% del deporte es amateur, aunque esté regulado y vayas a los Juegos Olímpicos y seas medalla de oro. La parte aseguradora va regulada diferente. En este último mes hemos tenido que hablar con cada compañía y cada una tenía posicionamientos distintos, desde los que daban cobertura a la primera, a los que no. En un atleta profesional, cualquier equipo sigue entrenando y sus pólizas, aunque vayan por mutualidad, siguen en alta de trabajo.

 

 

P.: Sin supervisión efectiva y en condiciones no habituales, ¿quién asume los costes en caso de lesión en el domicilio?

R.: En estos últimos días han llegado muchas comunicaciones de las aseguradoras, desde suspensión total de las coberturas, a que si quieren entrenar en casa deben asegurar que se dan las condiciones. No hay unanimidad del sector. En muchos casos se están reduciendo las coberturas en confinamiento, porque el riesgo de que se lesionen los jugadores, que es el principal activo de un club, es limitado. En el caso de las federaciones, deben vigilar porque si se cancela la póliza y el atleta se daña, podría no estar cubierto. 

  

 

 


P.: Si el atleta se encuentra sometido a un expediente de regulación temporal de empleo (Erte), ¿queda desprotegido contra lesiones en su trabajo de preparación?

R.: Cuando tú haces un Erte de reducción de la jornada, los deportistas de la entidad siguen estando de alta para la actividad. A nivel del deportista profesional, les tienes que seguir dando la cobertura; sólo la pierden si dejan de entrenar al 100%, y eso no se está dando.

 

P.: ¿Qué nuevos productos han ido surgiendo para los atletas que no existían cuando usted era profesional?

R.: La oferta es bastante parecida a la que existía cuando yo jugaba; no ha habido grandes cambios. En mi época había mucha póliza para cubrirse ante descensos y la invalidez temporal, porque las franquicias eran bajas y al jugador le aseguraba unos ingresos fijos en ese escenario. También había otros que estaban de baja entre lunes y jueves, pero el viernes ya entrenaban con el alta y el fin de semana jugaban… Ahora los seguros no pierden ingresos cuando están los jugadores de baja. Un tenista sí podría contratar seguro de invalidez temporal, por si cogiera un virus o enfermedad.

 

P.: ¿El deporte español puede aprender algo de las prácticas en otros países?

R.: En LaLiga, los jugadores tienen garantizado el 100% del sueldo, aunque estén de baja, algo que no pasa en el resto de grandes ligas. En los otros países, se firma una póliza de seguro y a partir de determinados días de lesión ya no es el club el que paga la nómina, sino la aseguradora. Es una fortaleza para el deportista y una debilidad de los clubes españoles. En Holanda, un seguro que se promovió con Cruyff es que a todos los atletas profesionales les quitan parte de sus ingresos para una póliza de ahorro que nunca pueden rescatar hasta los 35 años, para que tengan ahorros cuando se retiren.