Los circuitos de F-1 ponen en duda el proyecto de Liberty Media

Volantazo de los promotores de los Grandes Premios de Fórmula 1. La Asociación de Promotores de eventos de la F-1 (Fopa) ha emitido un comunicado poniendo en duda la estrategia de Liberty Media, entidad propietaria del Mundial de automovilismo desde 2016. El organismo ha mostrado su descontento por el cambio a modelo de pago de la retransmisiones y ha apuntado a “falta de claridad” sobre el futuro de esta disciplina.

“Al deporte ya no le interesa que los aficionados hayan perdido acceso al contenido y a las retransmisiones. Hay una falta de claridad sobre las iniciativas nuevas de F1 y una falta de compromiso con los promotores sobre su introducción”, aseguran. Según la Fopa, “no deberían llegar carreras nuevas que sustituyan a las que ya existen, aunque a la asociación está motivada por los modelos de negocio alternativos ofrecidos  a los futuros circuitos”, señala.

Este comunicado llega meses después de que Liberty Media diera a conocer sus intenciones de organizar carreras en nuevos escenarios, como Miami, una iniciativa que preocupa a los promotores. En este sentido, el promotor del Gran Premio de Gran Bretaña, Stuart Pringle, declaró hace meses al diario Daily Mail que “parece que Miami está consiguiendo un acuerdo gratuito. Esto no le ha sentado bien a nadie y nos preocupa mucho la salud de la categoría en el futuro con la gente que está al frente ahora”.

La competición automovilística mejoró en 2018 su audiencia global, hasta un 10% más que el año anterior, alcanzando 490,2 millones de espectadores únicos. El incremento fue aún mayor en los veinte mercados principales (entre los que no se incluye España), donde el avance fue del 14% en comparación con 2017.