LaLiga gastó 12 millones de euros en ‘test Covid’ para el regreso de la competición

LaLiga no escatimó en millones para que el fútbol pudiera volver a principios de junio. El gasto en pruebas de detección del coronavirus fue de 11,8 millones de euros, un desembolso que la patronal del fútbol realizó para que los futbolistas volvieran a entrenar y a competir tras el parón por la pandemia, según consta en la memoria de LaLiga correspondiente al ejercicio 2020, cerrado el pasado julio.

Además, LaLiga se gastó otros doce millones de euros en desplazamientos, ya que el protocolo obligaba a los clubes a viajar aplicando medidas de seguridad como limitaciones en el número de pasajeros o mantener los grupos estables de convivencia.

LaLiga tuvo que gastar un total de 27,2 millones de euros para la aplicación de un protocolo para la competición, que se mantiene esta nueva campaña.

Según el protocolo de LaLiga, todas las personas que formaban parte de la concentración de un equipo profesional de fútbol debían realizarse una prueba PCR dos días antes de empezar los entrenamientos en solitario. El día de inicio de los entrenamientos era necesario un nuevo PCR, así como una prueba serológica.

La segunda ronda de test, la denominada de control, se debía realizar antes de empezar los entrenamientos en grupo, mientras que la tercera se realizó justo antes del arranque de la competición. Además, en las diferentes fases de retorno de los entrenamientos era imprescindible la realización de una prueba diaria a plantilla, cuerpo técnico y equipo médico.

A un precio medio de cien euros por test, el gasto de LaLiga equivaldría a un total de 120.000 pruebas. Desde mayo, cuando los equipos volvieron a los entrenamientos siguiendo el protocolo, hasta el final de la competición, los equipos de primera y segunda se sometieron a los test periódicos de LaLiga para garantizar la salud de los deportistas y asegurarse que se mantenía la burbuja del fútbol profesional.