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La ‘sobremesa’ reina en la asistencia de Primera División, que ya roza los 5,7 millones de fans

La competición retrocede un 2,7% en las primeras 21 jornadas, lastrada sobre todo por los problemas del FC Barcelona. El sábado y la franja de las 16:15 horas, las que mejor se comportan.

Marc Menchén

7 feb 2018 - 05:00

 

 

La Liga Santander continúa arrastrando los efectos del 1 de octubre. No sólo porque ese día el FC Barcelona decidió jugar a puerta cerrada contra la UD Las Palmas, sino porque las imágenes de cargas policiales, unido a los atentados del mes de agosto, han incidido directamente en la llegada de turistas a Cataluña y al Camp Nou. El club azulgrana es el que peor se comporta en la competición durante 2017-2018, que hasta enero acumulaba 5.679.331 de espectadores, un 2,7% menos que en las 21 jornadas de la campaña anterior. Ello, a la espera del partido aplazado entre el CD Leganés y el Real Madrid por su coincidencia con el Mundial de Clubes.

 

El Barça acentúa tres puntos y retrocede un 21,8% en comparación con la media de 2016-2017, según los datos recopilados por Palco23 en la serie patrocinada por CaixaBank. Esta cifra del Camp Nou podrá ser maquillada previsiblemente con las visitas de Real Madrid y Atlético de Madrid. Pese a ello, el club blaugrana es el segundo de la clasificación con 60.523 personas de media, sólo superada por el conjunto blanco, que mejora un 1,3% interanual y se sitúa en 68.163 aficionados. El Atleti crece un 30% gracias al estreno del Wanda Metropolitano, que ha reunido a 58.076 personas por encuentro.

 

La media de la competición se mantiene en torno a los 27.300 aficionados, con Real Betis (+46,4%), Athletic Club (+0,6%), Valencia CF (+18%) y Sevilla FC (3,3%) muy por encima de estos registros. En estos casos influyen tanto las remodelaciones y ampliaciones del aforo, como la buena marcha deportiva, que sería el caso del conjunto ché. Aunque lejos de poder superar la barrera de las 30.000 personas, es reseñable el buen ritmo de los recién ascendidos, que crecen por encima del 50% respecto a su último curso en la Liga 1|2|3.

 

La ampliación del aforo ha permitido al Betis contrarrestar el efecto de jugar en lunes y viernes muchos de sus partidos, un factor que al RCD Espanyol le está penalizando. El club ha disputado seis partidos como local antes o después del fin de semana, en los que la entrada ha estado por debajo incluso del 40% de la capacidad del estadio. Ello se ha traducido en una caída del 10,5% respecto a la media de 2016-2017, un decremento sólo superado por el Barça y por la UD Las Palmas (-13,7%), que ocupa plazas de descenso.

 

 

 

 

Los datos recopilados revelan que las peores entradas se registran viernes y lunes, con 21.340 personas y 17.958 personas de media, respectivamente. Además, la tasa de ocupación de los recintos cae drásticamente, del 71,5% de media de toda la Primera División al 67,3% en la víspera de fin de semana y al 56,3% en el día posterior. En total, hasta la jornada 21, que concluyó en enero, se habían disputado 19 partidos cada uno de estos días.

 

También existen diferencias entre el sábado y el domingo, con el primero de estos días como más favorable en términos de ocupación: 76,1% frente a 71,6%. A nivel de horarios se impone la sobremesa, con el duelo de las 16:15 horas como el más relevante con 33.871 personas y una ocupación media del 77,6% de los asientos. Le siguen la franja en la que los partidos empezaron entre las 20:00 horas y las 20:45 horas, con 34.076 fans y un ratio del 75,3%. Ahora bien, ahí influye que LaLiga acostumbra a reservar esas franjas a Barça, Madrid o Atleti, como gancho para que los telespectadores se enganchen al carrusel televisivo de cada jornada.

 

Por otro lado, y pese a los recelos que inicialmente generó, la franja matinal no sólo está siendo útil para dar visibilidad al fútbol español en Asia. Las estadísticas revelan una asistencia media de 23.805 personas en los partidos de las 13:00 horas del sábado y las 12:00 horas del domingo, con una ocupación del 71,5%. Muchos clubes valoran positivamente esta franja, tanto por el mayor ambiente familiar que fomentan como por la posibilidad de promover eventos paralelos antes y después.

 

En cualquier caso, y pese al retroceso que acumula el torneo hasta enero, la Primera División es la liga nacional que más ha crecido desde 2010-2011, con un avance del 6,5% pese a los estragos que en el último lustro provocó la crisis en los hogares españoles. Su reto más inmediato es acotar aún más las distancias con Bundesliga y Premier League, que le superan en más de dos millones de espectadores por campaña gracias a su mayor volumen de población.