La Ligue 1, en problemas: Canal+ sólo quiere los mejores partidos

La Ligue 1 busca televisión. La liga francesa de fútbol llegó a un acuerdo con Canal+ hasta final de la temporada 2020-2021 como solución provisional fruto de la rescisión del contrato firmado con Mediapro, el mayor de la historia de la competición. De cara a la 2021-2022, la emisora que actualmente retransmite el torneo advierte a la liga de que no quiere emitir todos los partidos, debido a las bajas cifras de audiencia, informa L’Équipe.

Canal+, que transmite actualmente la Ligue 1 tras el fracaso de Mediapro, no desea quedarse con todos los derechos de la liga de cara a las tres próximas temporadas, ya que sólo le interesan los mejores partidos. beIN Sports, la posible alternativa, tampoco parece interesada.

La emisora de pago ya valoraba otras opciones en diciembre, cuando la crisis golpeó a la Ligue 1 y se vio obligada a buscar un nuevo socio audiovisual con carácter de urgencia. Canal + estaba dispuesta a pagar 390 millones de euros por los dos partidos de la jornada, además de 200 millones de euros adicionales por la creación y distribución del canal de la Ligue 1 que incluiría el resto de partidos. Ahora, en cambio, descarta la segunda parte de su propuesta.

La Liga de Fútbol Profesional francesa busca nuevo socio de derechos de televisión, con el objetivo de evitar una nueva crisis como la del pasado otoño

Ante esta situación, desde la Liga de Fútbol Profesional francesa (LFP) se han puesto en contacto con Dazn. La plataforma over-the-top (OTT) ya se ha hecho con los derechos de otras grandes competiciones nacionales, como la Serie A italiana, donde se ha quedado con dos lotes de partidos para el ciclo que va desde la 2021-2022 hasta la 2023-2024 por 840 millones de euros, aunque esa adjudicación ha sido impugnada ante los tribunales por Sky Sport.

La crisis amenaza de nuevo al fútbol francés, que se puede quedar sin socio de televisión a final de temporada. Está por ver qué papel está dispuesta a ejercer Dazn, viendo los problemas para rentabilizar los derechos que han tenido Mediapro y Canal+.