Competiciones

La Liga, entre el 'sorpasso' a la Bundesliga y el océano de ingresos con la Premier

M.Menchén

2 jun 2016 - 17:06

La Liga se ha convertido en una de las competiciones deportivas que más rápido está creciendo a nivel internacional, pero el camino es largo y el trabajo por hacer no es menor. La competición española, incluida Primera y Segunda, logrará este año rebasar a la Bundesliga (1 y 2) por volumen de ingresos, pero el nuevo contrato audiovisual de la Premier League hará que ésta le siga doblando en ingresos a partir de la temporada 2016-2017.

 

El nuevo contrato audiovisual ha sido básicamente el gran motor del cambio, que ha permitido al fútbol español pasar de 2.053 millones en ingresos la última temporada a cerca de 2.750 millones en la 2015-2016 y una previsión de mínimo 2.980 millones de euros para la próxima campaña, según las estimaciones del Annual Review of Football Finance 2016 que elabora Deloitte. Estos datos no contemplan las plusvalías que obtienen los clubes por traspasos, un aspecto clave en la viabilidad de la competición en los últimos cursos.

 

 

 

La firma de servicios profesionales valora que, más allá del incremento de ingresos por televisión, lo importante es que "el paso hacia la venta colectiva mejorará el equilibrio competitivo dentro de la liga", un aspecto que ya ha ayudado a competiciones como la Bundesliga o la Premier League a generar más interés mediático.

 

El torneo alemán, sin embargo, ha visto como La Liga le adelanta en ingresos gracias a los diferentes timings de sus ciclos audiovisuales. En su caso, el crecimiento del 15% de la facturación que estiman se deberá esencialmente a "la continua alta demanda de los socios corporativos, con al menos la mitad de los equipos de la Bundesliga habiendo anunciado nuevos acuerdos de patrocinio importantes que entrarán en vigor en ese período".

 

Las estimaciones para la Ligue-1 y la Serie A se sitúan en incrementos del 12% y el 15%, respectivamente, en los ingresos, y básicamente porque los contratos de televisión que tienen firmados son crecientes. En el caso del torneo italiano no se vislumbran nuevas palancas de crecimiento, mientras que Deloitte apunta a que el legado de la Uefa Euro 2016 podría suponer un salto cualitativo de la explotación comercial de los estadios en Francia. En cualquier caso, mientras que la Serie A por fin podrá rebasar los 2.000 millones, el campeonato galo todavía seguirá lejos.

 

Nada que ver con la realidad de la Premier League. La entrada en vigor de los nuevos contratos con Sky y BT Sport supone casi doblar los ingresos por televisión del torneo, cuya facturación global pasará de una estimación de 4.820 millones de euros para la 2015-2016 a un total de 5.830 millones en la 2016-2017, el doble que hace sólo cinco años.

 

El trabajo del torneo británico a partir de la visibilidad mediática obtenida a nivel internacional ayuda a entender por qué, pese al fuerte peso que tienen las retransmisiones, no es la competición que más depende de ellas para cuadrar las cuentas. Los derechos audiovisuales supusieron el 53% de la facturación de la Premier en la 2014-2015, un porcentaje inferior al que tuvieron en la Ligue-1 (61%) y sólo cinco punto más que La Liga (48%). De hecho, la competición más equilibrada es la Bundesliga, cuya actividad se reparte casi a partes iguales entre patrocinios, televisión, taquilla y comercial.

 

 

 

Estos datos no incluyen, como ya se ha dicho, las plusvalías por traspasos, el gran motivo por el que La Liga ha logrado recuperar la rentabilidad del negocio en plena crisis económica. Entre 2010 y 2015, la Bundesliga ha logrado duplicar su resultado operativo, hasta alcanzar los 316 millones de euros. Se trata de una importante mejora que, sin embargo, aún les sitúa muy lejos de la Premier League, que en este mismo período ha casi multiplicado por diez sus ganancias por operaciones, al pasar de 81 millones en la 2010-2011 a 718 millones de euros en la 2014-2015 y con solo tres equipos en rojo.

 

El mayor problema sigue estando en Francia e Italia, donde las patronales no acaban de dar con la tecla para hacer rentable el fútbol. Los italianos acumulan pérdidas operativas por 638 millones en cinco años, y sólo en uno de ellos bajaron esta cifra de la franja de los 150 millones. En Francia la situación no es tan dramática, aunque todavía no se vislumbra el punto de equilibrio tras perder 35 millones el último año, según los datos recabados por Deloitte.