La Generalitat prepara un plan estratégico para el Circuit de Barcelona-Catalunya

La Generalitat apuesta por el Circuit de Barcelona-Catalunya. El conseller de Empresa i Treball, Roger Torrent, ha desvelado que el ejecutivo catalán trabaja en un plan estratégico para adaptar las instalaciones deportivas a las nuevas tendencias de innovación y sostenibilidad del sector del motor.

Al mismo tiempo, en comisión parlamentaria ha explicado los proyectos de la Conselleria para esta legislatura, Torrent ha confirmado que la Generalitat trabaja para renovar los contratos de Fórmula 1 y de MotoGP para el Circuit.

“Estamos trabajando en la renovación y esperamos que se resuelva positivamente, pero esta colaboración debe ir necesariamente vinculada a un planteamiento modernizador de fondo”, ha asegurado Torrent.

El objetivo de la Generalitat es la “dinamización” del Circuit a través de un plan estratégico, que incluye adecuar unas instalaciones que tienen treinta años y encontrar solución a algunos “déficits”.

El proyecto del Govern pasa por “la sostenibilidad, el equilibrio y la innovación tecnológica”, con la intención de crear un valor añadido que “irradie” en la industria.

El conseller de Empresa y Treball, Roger Torrent, se muestra confiado de poder renovar los acuerdos por la Fórmula 1 y MotoGP

“No sabemos cómo evolucionará el mundo de la competición del motor, aunque continuará siendo un sector tractor, pero queremos generar más vida y más valor añadido y atractivo turístico, también industrial y tecnológico más allá de los grandes premios”, ha detallado el conseller.

A principios de mes, el Campeonato del Mundo de Motociclismo desembarcó en el Circuit de Barcelona-Catalunya con la novedad del público. A diferencia de la pasada edición, cuando por motivos de seguridad debido al Covid-19 se disputó a puerta cerrada, se le permitió acoger a 20.000 aficionados en sus gradas, un 20% de su aforo total, que es algo superior a 100.000 espectadores.

Por otro lado, la Fórmula 1 ha puesto nuevas condiciones al Circuit. Además del pago del canon por albergar la carrera, el Circuit de Barcelona-Catalunya deberá cumplir una serie de condiciones que le ha puesto la Fórmula 1 sobre la mesa de negociación si quiere seguir en el calendario, entre ellas, una inversión de entre 70 y 80 millones de euros.