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La Federación de Natación dispara sus ingresos un 19% en 2022, hasta doce millones de euros
De cara a 2023, la Real Federación Española de Natación cuenta con un presupuesto de más de once millones de ingresos y prevé unas pérdidas de entre 50.000 euros y 60.000 euros. La Rfen cerró el curso con más de 70.000 federados.
23 mar 2023 - 05:00
La Real Federación Española de Natación (Rfen), al alza. La entidad cerró 2022 con unos ingresos de doce millones de euros, lo que representa un incremento del 19% frente a 2021. Además, según explica su presidente, Fernando Carpena, la entidad tendrá unas ligeras pérdidas de menos de mil euros, que aún se podrían compensar a través de alguna subvención, ya que las cuentas aún no se han cerrado.
De cara a 2023, la entidad cuenta con un presupuesto de más de once millones de euros de ingresos y prevé unas pérdidas de entre 50.000 euros y 60.000 euros. “El reto fundamental para este ejercicio es equilibrar el presupuesto de ingresos y gastos; es muy difícil que se pueda conseguir a través de las subvenciones, por lo que tendremos que conseguir más recursos propios”, explica Carpena. Por otro lado, cerró el periodo con un incremento de las licencias del 10%, hasta más de 70.000 federados.
“Aún hay tiempo para no generar pérdidas, pero tenemos una situación que podemos soportar”, detalla, recordando que la entidad cuenta con un patrimonio neto de medio millón de euros.
La Federación de Natación ha visto incrementado su gasto por la acumulación de eventos internacionales
El aumento del gasto para el ejercicio se debe a la acumulación de eventos internacionales en vísperas a un año olímpico y aumento del coste de asistir, derivado del aumento de los gastos de los desplazamientos y alojamientos.
Por ahora, “tenemos siete millones, pero aún no hemos sumado subvenciones o ingresos que sabemos que vamos a tener pero que no han llegado; siempre hay que ser prudentes”, reitera el directivo. En este contexto, la Rfen desconoce el importe exacto que recibirá por las ayudas de Team Elite, el programa de 48 millones de euros destinado a París 2024. “Son ayudas finalistas que se tienen que gastar y ayudar a preparar todavía más a los deportistas; pero no son una subvención que sirva para ahorrar o nos libere de otra partida”, afirma.
Respecto a los recursos propios, quiere incrementar los 390.000 euros que la entidad ingresa en márketing y prevé generar un superávit con la organización de la Super Final de la Copa del Mundo de Natación Artística en la piscina del Parque del Oeste de Oviedo entre los días 2 y 4 de junio de 2023.
Por otro lado, espera alcanzar entre 800.000 euros y 900.000 euros de ingresos por licencias, así como 380.000 euros de derechos de inscripción. Por otro lado, espera que la formación reporte 400.000 euros a las arcas de la entidad y el patrocinio, al menos, suponga otros 400.000 euros.
La Rfen prevé ingresar entre 800.000 euros y 900.000 por licencias
“El 90% de las federaciones no tenemos capacidad alguna para sufragar la alta competición”, asegura y recuerda que la Rfen tiene un departamento de tres personas dedicado exclusivamente a las tareas administrativas para gestionar la subvención de siete millones de euros que hay que dividir entre 200 actuaciones.
“La federación se financia con dinero del Estado y este es un concepto clave porque hacemos una función delegada”, subraya. Pese a esto, considera que “el objetivo de toda federación debe ser caminar sin ayudas quitando la alta competición, gestionando la actividad estatal y con acciones transversales que no generen déficit”.
En 2023, la entidad organizará un total de 56 eventos, de los que sólo el 20% son rentables
A su parecer, una de las vías para generar más ingresos es aumentar la actividad estatal, algo que, por ahora, es complicado por la falta de infraestructuras. “Faltan piscinas y necesitamos que tengan capacidad para 2.000 o 2.500 personas”, agrega.
Para esta temporada, la federación organizará 56 eventos. De ellos, sólo el 20% es rentable porque “permiten la participación de un número suficiente de deportes que permite compensar los gastos”; sin embargo, el 80% restante, que incluye pruebas de saltos, aguas abiertas o artística, con menos participantes, “no resultan económicamente productivas, pero hay que hacerlo”, destaca.