La Euroliga limita al 40% la aportación de los accionistas y elimina el acceso vía ligas nacionales

La Euroliga actualiza su política de fair play financiero. La competición ha aprobado el nuevo plan de estabilidad financiera, por el que se compromete a limitar la dependencia presupuestaria que los clubes tienen hacia su máximo accionista. A partir de la temporada 2022-2023, los propietarios de un equipo no podrá aportar más del 40% del presupuesto; el resto deberá generarse con recursos propios, como la venta de entradas, merchandising, patrocinios, ingresos audiovisuales y por resultados deportivos.

Durante la próxima campaña, al igual que en 2018-2019, el límite de la aportación presupuestaria del dueño de un club es del 65%, un porcentaje que se irá reduciendo paulatinamente hasta alcanzar el 40% en 2022-2023. Esta decisión obligará a los clubes a dedicar más esfuerzos a generar ingresos y, por primera vez, impedirá que la mayoría del presupuesto de un equipo proceda de un único mecenas, como puede ser un inversor o la sección de fútbol, que tiene más capacidad de generar negocio.

Así lo ha decidido la junta de accionistas de la Euroliga, que ha dado el visto bueno a la propuesta realizada por los once clubes que tienen licencia para disputar la competición. Entre ellos están FC Barcelona, Real Madrid, Saski Baskonia, Milan, Maccabi, Efes, Fenerbahçe, Olympiacos, Panathinaikos, Cska y Zalgiris. La medida sólo afectará a los clubes que compitan en este torneo, aunque la idea es hacerla extensiva a la Eurocup en un futuro. En la actualidad, el presupuesto mínimo para competir en la Euroliga es de 5,4 millones de euros.

El 16% de los ingresos de la Euroliga se distribuirán entre los clubes durante 2019-2020

Asimismo, la organizaciónha decidido que repartirá un 16% de sus ingresos entre los clubes. No ha trascendido la aportación económica en total, pero la entidad afirma que el importe se incrementará un 16% respecto a la temporada anterior.  

En la reunión celebrada en Múnich los clubes también han aprobado la implementación de un código de conducta en los pabellones que se empezará a ampliar a partir de la próxima temporada. Con esta política, se busca “garantizar una experiencia segura y acogedora a todos los asistentes a los partidos”.

La Euroliga repartirá invitaciones a cinco equipos, y tres de esas wildcards serán anuales

Otra de las decisiones que se ha tomado en la asamblea ha sido repartir invitaciones a tres equipos para disputar la Eurolig. De este modo, el torneo lo jugarán los once equipos con licencia, dos procedentes del a Eurocup, dos más asociados (Asvel y Bayern de Múnich), además de los tres equipos que logren una wildcard anual. Eso sí, el campeón de la Liga Adriática tendrá preferencia, ya que no tiene ningún club asociado ni con licencia en la Euroliga.

En la práctica, esta decisión provoca que el campeón de la ACB no tenga acceso directo a la competición europea, lo que ha provocado el “firme rechazo” por parte de la patronal del baloncesto español. La entidad ha condenado “la arbitrariedad del nuevo sistema de acceso, que reemplaza la habitual clasificación por ligas nacionales con la decisión de entregar cinco Wild Cards, tres de ellas anuales”.