Competiciones

Especial 2020: El negocio del deporte en el año del Covid-19

Juegos Olímpicos: el Covid frena el mayor acontecimiento deportivo del mundo

Ni el fútbol con la Eurocopa, ni el baloncesto con las estrellas de la NBA, ni el tenis con los Grand Slams, ni el fútbol americano con la Super Bowl. El verdadero shock del año en el mundo del deporte ha sido la cancelación de los Juegos Olímpicos que se iban a disputar en Tokio el verano de 2020 por la pandemia del Covid-19. 

Albert Ferrer

24 dic 2020 - 04:56

 

 

Como cada año, Palco23 realiza en las últimas semanas de diciembre un repaso a los últimos doce meses en el negocio del deporte, marcados por el impacto de la pandemia del Covid-19. Análisis macroeconómico de España y el mundo, recorrido por los fenómenos sociales que ha provocado el coronavirus y reportajes sobre el impacto en los principales clubes, competiciones y federaciones del sector forman el Especial 2020: el negocio del deporte en el año del Covid-19.

 

 

Cada cuatro años el mundo se para frente al televisor durante casi un mes para ver competir a los más de 200 países que disputan los Juegos Olímpicos. En 2020, debido a la pandemia del Covid-19, la llama que prendía la antorcha olímpica se vio obligada a apagarse. La cancelación de los Juegos Olímpicos de Tokio es un acontecimiento histórico, pues sólo ha sucedido tres veces más y siempre por conflictos bélicos: Berlín 1916 (Primera Guerra Mundial), Tokio 1940 (Segunda Guerra Mundial) y Londres 1944 (Segunda Guerra Mundial).

 

El apagón de Tokio 2020 será de tan solo un año, puesto que el Comité Olímpico Internacional (COI) y el comité organizador de los Juegos Olímpicos han previsto retomarlos en las mismas fechas de 2021, una vez el riesgo de contagio del Covid-19 se haya superado.

 

 

 

A finales de marzo, cuando la mayoría de las competiciones de élite se habían pospuesto o cancelado, el COI era la única entidad que mantenía viva la esperanza de albergar una competición de carácter global para 2020. Finalmente, tras largas discusiones entre los organizadores, los comités olímpicos de distintos países y el COI, acordaron aplazar el certamen durante un año, hasta el verano de 2021.

 

En una era totalmente digitalizada donde hay una inmensa cantidad de fuentes audiovisuales de entretenimiento, los Juegos Olímpicos destacaban y siguen haciéndolo hoy en día por encima de cualquier competición deportiva. Así, su negocio se ha duplicado en prácticamente veinte años, pasando de 3.000 millones de euros entre el ciclo 2001-2004 a los 6.000 millones de euros previstos para los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. Este crecimiento ha provenido especialmente de la revalorización de los derechos audiovisuales, que representan un 73% de los ingresos del negocio olímpico.

 

En diciembre, la organización cifró en 15.400 millones de euros una última versión del presupuesto para la celebración de los Juegos Olímpicos. Una cifra que supone el 21% más del anteriormente presupuestado, debido a los costes del retraso de la competición y al incremento de las medidas antiCovid-19.

 

 

Los Juegos Olímpicos son también una gran oportunidad de mercado para muchas marcas: más de 2.600 millones de personas vieron la competición celebrada en 2016 en Rio de Janeiro. Los patrocinios globales derivados de los Juegos Olímpicos aportaron el 18% de todos los ingresos del organismo en 2016, cuando por primera vez se superaron los 1.000 millones de euros gracias a la alianza con una docena de grandes marcas de renombre a nivel mundial, como Coca-Cola, McDonald’s o Visa.

 

El aplazamiento de un año de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 tiene un precio: 2.800 millones de euros es lo que costará posponer unos Juegos Olímpicos en pleno siglo XXI, según informó el comité organizador. Es una cantidad muy por encima de la que habían calculado los expertos antes de concluir el coste definitivo, que anteriormente se situaba en 1.605 millones de euros. Los costes adicionales derivados del aplazamiento serán compartidos entre el comité organizador de Tokio 2020, el gobierno metropolitano de Tokio y el Gobierno japonés.

 

Además de pasar a la historia por ser los Juegos Olímpicos de la pandemia del Covid-19, también lo harán por ser los más caros de la historia, con un gasto que aumentará debido a su aplazamiento. Un estudio elaborado por la Universidad de Oxford ha cifrado en cerca de 13.000 millones de euros el coste de la postergación del evento en Japón. Además, la previsión de la universidad es de que la cifra se eleve varios miles de millones más durante el transcurso del año. Con esas cifras, Tokio superará a Londres 2012, que supuso un desembolso de 12.290 millones de euros en los Juegos Olímpicos más caros celebrados hasta la fecha.

 

 

Según el estudio de Oxford, cada cita olímpica desde 1960 ha superado su presupuesto, de media, un 172%. Esto se explica por tres factores: el primero es que albergar unos Juegos Olímpicos es una situación muy difícil de revertir, ya que las ciudades no tienen la opción de cancelar el evento si se disparan los costes. El segundo, no se puede ganar tiempo y repartir el presupuesto a lo largo de más años, puesto que la fecha de los juegos es inamovible. El tercero, la ciudad elegida tiene la obligación de cubrir los posibles sobrecostes, algo que se denomina “síndrome del cheque en blanco”.

 

El aplazamiento de los Juegos Olímpicos ha supuesto un gran varapalo para Tokio, sobre todo económico, pues deberá aumentar exponencialmente su presupuesto para disputar el evento. En el marco de un proceso de recorte de gastos, los organizadores han propuesto al COI más de cincuenta medidas para simplificar los gastos del evento en un 2% del presupuesto, o lo que es lo mismo, un ahorro de 238 millones de euros. El consejero delegado de Tokio 2020, Yoshiro Mori, cree que “aún hay margen para ahorrar más dinero” y rebajar el presupuesto final de los juegos.

 

El turno de Francia

Los Juegos Olímpicos de París 2024 asomaban en la distancia como el principio de una nueva era dentro del olimpismo, y así lo confirmó el COI a finales de año: serán unos juegos en los que se ahorren hasta 400 millones de euros y donde habrá cambios en las disciplinas. El breakdance, el surf, la escalada y el skateboard serán deportes olímpicos. Mientras que la marcha será suprimida y el kárate no ha superado el corte.

 

Thomas Bach, presidente del COI, aseguró que el COI está preparando los Juegos Olímpicos de 2024 en relación con un mundo postcoronavirus. “Con este programa estamos preparando a los juegos de París 2020 para el mundo postcoronavirus -dijo-; estamos reduciendo los costes y la complejidad de los Juegos al mismo tiempo que buscamos elementos innovadores y creativos que rompan con los códigos existentes”.