Colau se vuelca ahora con la Barcelona World Race y pide a Montoro adelantar los beneficios fiscales

El nuevo gobierno municipal de Barcelona va conociendo poco a poco la importancia de algunos de los grandes eventos deportivos que acoge la ciudad y ha empezado a matizar su posición. Si este verano el consistorio ponía en duda el apoyo a la Barcelona World Race, ahora la alcaldesa Ada Colau ha decidido volcarse con la regata de vuelta al mundo a vela a dos. Hasta el punto de haber enviado una carta al Ministerio de Hacienda para reclamar pueda beneficiarse ya en 2016 de los beneficios fiscales para la edición que se celebrará en 2018, según ha podido saber Palco23.

No se trata de una cuestión baladí. Desde la Fundació Navegació Oceànica Barcelona (Fnob) consideran que para la captación de patrocinadores sería vital poder ofrecer a la marcas ya en 2016 una deducción del 15% sobre los gastos de publicidad y propaganda que sirvan directamente para la promoción de la regata de 2018, no pudiendo exceder la deducción del 90% de la donación al consorcio correspondiente que toda la inversión.

La ofensiva institucional de Colau ha ido acompañada estos días de la negociación de CDC en el Senado. El grupo convergente estuvo negociando con el del PP la introducción de una enmienda que anticipara ya al próximo año la declaración de evento de "excepcional interés público", y no esperar al habitual trienio que se había acordado para las tres ediciones previas: los dos años en los que transcurre la regata y el anterior.

Sin embargo, fuentes parlamentarias admitieron ayer a este diario que no han logrado que la enmienda se aprobara. Eso sí, también avanzaron que buscarán la fórmula para poder incluir este beneficio fiscal a través del Congreso o del Senado una vez se constituyan las nuevas Cortes tras las elecciones generales del próximo 20 de diciembre.

Se trata de una opción que seguiría permitiendo convertir 2016 en un ejercicio hábil para que los patrocinadores se beneficiaran de las desgravaciones, aunque no daría al Fnob la seguridad negociadora que sí daba el hecho de que se aprobara ya en los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para el próximo año.

En la última edición, que arrancó a mediados de diciembre de 2014 y concluyó este mes de abril, los patrocinadores principales fueron Estrella Damm, Renault y Johnson&Johnson, mientras que en la división de patrocinadores oficiales se encontraban Ono, Danone, Gaes, Boehringer Ingelheim, Gramona e Invictus, el perfume de Paco Rabanne. Además, los patrocinadores con filiales en España y que apoyaron a barcos españoles también gozaron de los beneficios fiscales.

En la regata de 2014-2015, el presupuesto se situó en 45 millones de euros: 20 millones de euros procedieron de los patrocinadores, 6 millones del remanente de la segunda edición, 4,3 millones de la aportación municipal a cambio de asumir la propiedad del inmueble del Muelle de Levante del Puerto de Barcelona donde tiene su sede, y generación de recursos propios.

La aportación pública es insignificante si se contrasta con el impacto económico del evento, que un estudio de Esade cifra en 60 millones de euros gracias a las audiencias que genera la regata y el gasto asociado de los equipos y los aficionados en la ciudad.

En esta edición participaron ocho tripulaciones, que navegaron a bordo de barcos IMOCA 60, de 18 metros de eslora y un mástil de hasta 29 metros de altura, equivalente a un edificio de diez plantas. Hugo Boss, Gaes, Renault y Neutrogena son algunas de las marcas que daban nombre a los equipos.