Banco Santander ultima un acuerdo para dar nombre a La Liga tras la salida de BBVA

La Liga volverá a vender el nombre de la competición. Pese a que en un principio se había decidido no buscar una alternativa y potenciar la marca propia, la patronal de clubes no ha renunciado definitivamente al title sponsor tras la era BBVA. De hecho, será un competidor suyo, Banco Santander, el que tomará el relevo si acaban llegando a buen puerto unas negociaciones que están muy avanzadas.

Según ha avanzado El Confidencial, fuentes próximas a las conversaciones han confirmado que el acuerdo entre la competición y la entidad bancaria se habría conseguido después intensas negociaciones con Samsung y Qatar Airways. De esta forma, la máxima categoría se llamaría Liga Santander y la Segunda división pasaría a llamarse Liga 1,2,3.

La razón de esta elección es que Javier Tebas prefería un patrocinador local, pero con reconocimiento mundial, para dar nombre a La Liga. Por este patrocinio Santander desembolsará una cantidad inferior a los 26 millones de euros por año que ha pagado BBVA en las últimas tres temporadas, siempre según el citado rotativo. El acuerdo debe ser aprobado hoy por la comisión delegada de la organización, donde están representados catorce clubes, según han confirmado a Palco23 fuentes cercanas a la negociación.

De confirmarse este contrato, los hechos contrastarían con lo que La Liga ha venido anunciando durante las últimas semanas al confirmar que la decisión definitiva era no volver a comercializar el activo del nombre de la liga por el momento. Así lo dijo Tebas: "La Liga no tendrá title sponsor porque pensamos que la marca se puede explotar mejor con varios patrocinadores. La Liga Adelante pasará a llamarse LaLiga2".

El área de marketing de la patronal, dirigida por Adolfo Bara, llevaba meses contemplando la opción de liberar la marca y no malvender el nombre de la competición por negociar a contrarreloj. Una negociación de este tipo puede alargarse hasta 18 meses, mientras que la organización ha tenido sólo siete meses para poner en marcha el proceso.

Además, no ha sido hasta la temporada que ahora termina que la Primera División ha logrado un verdadero impacto global con los nuevos contratos de televisión, por lo que tampoco ha habido tiempo suficiente para tener un producto que pudiese convencer una marca multinacional que pagara más de los 26 millones anuales que BBVA ha venido pagando en los últimos ejercicios.