Toni Freixa, una candidatura 'pyme' y jurídica para presidir el Barça

Con el espíritu de una pyme, aquel que desde la humildad y el esfuerzo quiere alcanzar grandes objetivos y hacerse un hueco en el panorama internacional. Este parece ser el mensaje con el que Toni Freixa aspira a ser el futuro presidente del FC Barcelona, después de haber participado en la última junta directiva como secretario y responsable del área jurídica. El precandidato formalizó ayer su candidatura y presentó su equipo, formado por trece personas y en las que apenas hay personas relevantes de la sociedad civil y el mundo empresarial catalán.

El hombre más destacado de la candidatura es Antoni Abad, presidente de la patronal Cecot, que agrupa a los empresarios del Vallés, una demarcación situada a las afueras de Barcelona y que se caracteriza por su alto componente industrial. Abad no es nuevo en lo de participar en campañas electorales, ya que en el pasado ha tratado de hacerse con el control de Fomento del Trabajo, la gran patronal catalana, cuando ésta se posicionó en contra de la independencia de Catalunya.

Abad ha sido uno de los últimos en sumarse a la candidatura, y probablemente habría llegado a la misma de la mano de Xavier Chalé. Él es el consejero director del centro educativo Montcau-La Mola, en Matadepera (Barcelona), de la que el dirigente patronal es el presidente. Chalé tampoco es nuevo en este tipo de procesos, ya que en el 2000 dirigió la campaña frustrada de Joan Castells para presidir el Barça. En paralelo, también ha sido director del Servicio de Empleo de la Generalitat y director comercial de Digital Media, sociedad vinculada al grupo Godó.

Otro de los ámbitos en el que existe cierto punto de conexión es Mazars. El abogado David Vilajoana es socio internacional de esta firma de auditoría y consultoría, y su pasión barcelonista le viene de su padre, Lluís Vilajoana, que fue directivo del Barça durante 24 años de la mano del expresidente y ahora presidiario, Josep Lluís Núñez. Su tío, Jordi Vilajoana, ha sido mano derecha del presidente de la Generalitat de Catalunya, Artur Mas, durante mucho tiempo.

Además de Vilajoana, por esta firma también ha pasado Albert Deulofeu, quien fue gerente del área fiscal de Mazars y ahora es socio de la asesoría Marca Cardinal. Esta consultora está especializada en las pymes, al igual que Euroforo Arasa De Miquel, de la que es socio Marcos Jover.

En el proyecto de Freixa también figuran empresarios, aunque de menor visibilidad mediática respecto a otros directivos que han pasado por las oficinas del Camp Nou. Están Lluís Jové, accionista y consejero del grupo químico Navacreus Luona, que factura 46 millones de euros y emplea a 150 personas, o Juan Manuel Alcaraz, miembro de la familia propietaria del grupo inmobiliario del mismo nombre y con buena relación con la familia Núñez y Reina tras años de cooperación empresarial.

En el equipo también están Francisco Ibáñez, socio del despacho Dret i Urbanisme Advocats; Joan Bertran, dueño de una gestoría; Edu Fossas, asesor financiero de GVC Gaesco; el notario Sergi González; Marc Mas, abogado del Estado y socio del despacho Coronas Advocats,y Marta de Llauder, la única mujer de la candidatura. Ella ha formado parte del patronato de la Fundación del Barça y es la directora general de Talent Point HR Consulting, una consultoría de recursos humanos.

Nueve abogados para "acabar con la judicialización del club"

Freixa, que también es abogado de profesión, ha formado un equipo en el que nueve de los catorce miembros son licenciados en Derecho. Curiosamente, uno de los mensajes que ayer lanzó es que "los culés estamos hartos de conflictos; jugamos para acabar con la judicialización del club". Esta idea choca en realidad con sus actuaciones, después de que él en 2010 votara a favor de demandar a la anterior junta directiva por las pérdidas sufridas en su mandato. Sí es cierto que él propuso zanjar la cuestión cuando la Justicia dio la razón al equipo de Joan Laporta.

El exdirectivo también atacará al ya expresidente Josep Maria Bartomeu por la vía de no gestionar el Barça únicamente como una empresa. "Jugamos para actuar con sensibilidad y responsabilidad en la gestión", defiende en su declaración de intenciones, después de que la anterior junta fuera acusada en más de una ocasión por tratar de malas formas a personal de la entidad.

Aunque dice ser corresponsable de los éxitos y fracasos de la junta que primero presidió Sandro Rosell y depués Bartomeu, Freixa ha considerado que "no ha llegado al nivel de excelencia que demanda este club, aunque esto no quiere decir que no haya sido satisfactoria en muchos ámbitos".