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La Uefa pide una segunda revisión de las finanzas del PSG

El presidente del órgano de control económico, José Narciso da Cunha Rodrigues, ha pedido que el informe del investigador jefe se vuelva a analizar tras cerrarse sin sanción alguna para el campeón de la Ligue-1.

Palco23

3 jul 2018 - 16:51

La Uefa pide una segunda revisión de las finanzas del PSG

 

 

El Paris Saint-Germain (PSG) aún podría ser sancionado por el incumplimiento de las normas de control económico. José Narciso da Cunha Rodrigues, exfiscal de Portugal y presidente del órgano de control económico de clubes (Cfcb) de la Uefa, ha pedido que la cámara de resoluciones vuelva a analizar el informe que se cerró sin sanción alguna contra el campeón de la Ligue-1 por un supuesto incumplimiento de las normas de fair play financiero.

 

El regulador del fútbol europeo enfatiza en un comunicado que “este anuncio no prejuzga en modo alguno el resultado de la revisión que llevará a cabo la cámara de resoluciones”. De hecho, también se ha pedido revisar el acuerdo que se firmó con el Galatasaray, al que se le impuso una multa de hasta 15 millones de euros por incumplir las normas y un importante plan de ajuste hasta 2022.

 

En el caso del PSG se desconocen los motivos para reabrir el caso, más allá de que muchos clubes y competiciones del Viejo Continente se han mostrado insatisfechos por la falta de sanción. En su investigación, el investigador jefe del Cfcb señaló que existía “una desviación aceptable” en las cuentas de 2014-2015 a 2016-2017, pese a que se habían aplicado “ajustes significativos en el valor razonable de varios contratos de patrocinio”.

 

 

 

 

Hasta ahora, el desvío máximo que permitían las normas de fair play financiero es de un máximo de 30 millones de euros siempre que fuera cubierto con aportaciones de los accionistas. No obstante, la definición de “desviación aceptable” se sitúa en cinco millones de euros. En su comunicado no precisa cuál habría sido el déficit provocado por ese ajuste contable respecto a parte de sus ingresos.


Entre los motivos de la reapertura del caso podría estar la posibilidad de poder tener una foto más real de la salud financiera del equipo galo ahora que ha concluido el ejercicio 2017-2018. De hecho, el organismo aclaró entonces que “se mantendrán bajo escrutinio minucioso y se analizarán a fondo” las cuentas, pues la dirección necesitaba unos elevados ingresos por traspasos antes del 30 de junio para no volver a cerrar con pérdidas tras pagar 222 millones de euros por Neymar.

 

La dirección del PSG aseguró ayer en un comunicado que “ha realizado un número significativo de traspasos en los últimos días para cumplir con la decisión del Cfcb y que continuará, como lo ha hecho desde el 1 de septiembre de 2017, proporcionando toda la información solicitada”. Algunos medios apuntaban a la necesidad del club de obtener 60 millones de ingresos extra antes del cierre del ejercicio, objetivo que se habría logrado en buena parte con las salidas de Javier Pastore al AS Roma y Yuri Berchiche al Athletic Club. 

 

En septiembre de 2017, la dirección del actual campeón de la Ligue-1 ya indicó que había cerrado ventas de jugadores “que ayudarán a mejorar los resultados del club en más de 104 millones de euros” en 2017-2018. Además, recordaba que, “si es necesario, tenemos bajo contrato a muchos jugadores de alto valor que permiten al club generar ganancias de capital muy significativas en las próximas dos ventanas de transferencia (enero y junio) de 2018”. Por el momento, no se han producido nuevas salidas.

 

En febrero de 2018 trascendió que el análisis externo solicitado por la Uefa revelaba que el PSG debería ajustar otros 75 millones de euros para adecuar a la realidad contratos con compañías de Qatar y con una fuerte vinculación a la propiedad. Ello, pese a que hace dos años ya rebajó en un 50% el contrato con el organismo de promoción turística del emirato, que es el que realmente se cuestionaba. El club también trabaja con Qatar National Bank, que aparece en la manga de la camiseta; la telecos Ooredo, que luce bajo los dorsales; beIN Sports, y la clínica deportiva Aspetar.

 

Las cuentas oficiales señalan que en los dos primeros años analizados se registró un beneficio neto próximo a los 10,5 millones de euros, mientras que 2016-2017 se concluyó con pérdidas de 18,84 millones. En ambos casos sorprende la evolución de las dos partidas cuestionadas: la de patrocinios ha pasado de 78,96 millones en 2013-2014 a 154,56 millones de euros en 2016-2017; los otros ingresos, donde no se aclara qué se incluye, se ha recortado ligeramente y aun así es la más relevante, pasando de 270 millones a 184,48 millones en este periodo.