Clubes

La subasta del estadio y el 17% del Hércules no recibe ninguna oferta

Palco23

15 jun 2016 - 17:04

El fútbol se ha convertido en un sector de interés para los inversores, pero hay clubes y clubes. La administración concursal de Aligestión Integral, vinnculada al constructor Enrique Ortiz, no ha conseguido encontrar comprador para el 16,88% del Hércules de Alicante CF y el 100% del estadio Rico Pérez, un paquete de activos por los que se reclamaba un mínimo de 14,7 millones de euros. El lote, según Efe, también incluye créditos contra el club que se concedieron entre 2007 y 2010 y entre 2012 y 2013.

 

El plazo para presentar ofertas finaliza el 22 de junio, fecha a partir de la cual podría volver a abrirse un plazo de presentación de ofertas a partir de un precio de salida inferior, con el objetivo de obtener liquidez para saldar al máximo posible la deuda impagada, que, según la prensa local, básicamente afecta a Banco Sabadell y el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF).

 

Hércules Alicante Rico Pérez
El Hércules está controlado por una Fundación dependiente del IVF.

 

"Mi interés, en defensa de los acreedores, entre ellos el IVF, es tratar de concitar el mayor interés por la compra del estadio al objeto de que se animen las pujas y aumente su precio de adjudicación", ha explicado la administración concursal a través de un escrito.

 

La situación podría cambiar en las próximas semanas, una vez se sepa si el conjunto alicantino asciende a Segunda División, para lo que antes debe derrotas al Cádiz en la promoción de ascenso. El cambio de categoría supondría una fuerte inyección de recursos por televisión y la posibilidad de recuperar a una parte de la masa social perdida.

 

Sin embargo, también existen riesgos. El empresario Juan Carlos Ramírez, con negocios en el sector de la venta de automóviles y exdirectivo del Elche CF, ha presentado un proyecto al IVF que pasaría por una operación acordeón, es decir, reducción de capital para compensar pérdidas del pasado y ampliación de capital posterior para reforzar el balance y aportar nuevos recursos. Una fórmula habitual, pero que al potencial comprador de esa participación del 16,8% le obligaría a inyectar dinero adicional para no diluirse.

 

Se desconocen los importes económicos que se manejan, pero el Hércules tiene una deuda pendiente de 18 millones de euros con el banco público de la Generalitat de la Comunidad Valenciana. Además, ha renegociado el calendario de pagos con varios acreedores excepto con Hacienda, a la que debe abonar unos 80.000 euros mensuales.

 

"En Segunda B los ingresos son nulos, no alcanzan ni para mantener la plantilla. Yo me comprometo a mantener con vida al Hércules en esta categoría y a poner mi dinero para ascender. Una vez en Segunda todo es diferente porque tendremos capacidad de devolver toda la deuda acumulada en los diferentes frentes", ha declarado el empresario, que en esa ampliación de capital podría capitalizar préstamos concedidos a la entidad para facilitar la toma de control.