Frenazo a la venta del Real Zaragoza a Spain Football Capital

Golpe a los planes del Real Zaragoza. El club de LaLiga SmartBank no pasará a manos de Spain Football Capital, sociedad con la que se llegó a un acuerdo en julio para que se hiciera con la mayoría de las acciones del conjunto aragonés.

Los propietarios del Zaragoza han trabajado para incorporar capital para mejorar la viabilidad de la entidad deportiva, y ha recibido muchos ofrecimientos, pero “la delicada situación financiera de la entidad ha provocado que la práctica totalidad de las negociaciones no prosperaran”.

César Alierta posee el 49% del capital social del Zaragoza, entre las acciones que tiene a título personal y las de la sociedad Prado de Altaoja. Acompañan al empresario tres familias: Yarza, propietarios del Heraldo, Juan Forcén, promotor, y Carlos Iribarren, del sector de la automoción.

El club reconoce haber mantenido conversaciones con un grupo inversor interesado, Spain Football Capital. Las negociaciones avanzaron hasta el punto concretarse la redacción de un contrato que las dos partes aprobaron y acordaron, pero no ha llegado la oferta económica vinculante.

El Zaragoza sigue abierto a propuestas de nuevos inversores interesados en aportar capital al club

El consejo de administración del club, de la mano del despacho de abogados de Cuatrecasas, mantiene abierto un proceso de entrada de capital, para estudiar y valorar las propuestas que se reciben.

Spain Football Capital, grupo liderado por los hermanos Álvarez del Campo y el abogado Kiko Domínguez, debía desembolsar más de veinte millones de euros para hacerse con el control del Real Zaragoza. Si se hubiera concretado la compra del club, hubieran tenido que afrontar el pago de nueve millones, correspondiente al desembolso de las acciones a los actuales propietarios, otros seis millones que corresponden a la fundación, así como 3,8 millones adicionales correspondientes a un crédito participativo de César Alierta, máximo accionista del club.

Por otro lado, en julio el Juzgado de lo Mercantil Número 2 de Zaragoza dio el visto bueno a la modificación del convenio de acreedores del conjunto aragonés, presentada antes del 16 de junio y con un volumen de adhesiones superior al 50% del total, ampliando hasta 2030 el plazo para que el Zaragoza abone su deuda de 24,7 millones de euros.