El Manchester United estanca ventas hasta septiembre por no jugar la Champions

El Manchester United no ha empezado todo lo bien que querría la temporada 2016-2017. El club británico ha cerrado el primer trimestre del ejercicio con unas ventas de 120,2 millones de libras, lo que supone un retroceso del 2,3% respecto al mismo período del año anterior. El beneficio neto ha bajado de 5 millones a 1,2 millones de libras.

Ed Woodward, vicepresidente ejecutivo, ha atribuido esta caída al "impacto de nuestra no participación en la Uefa Champions League", lo que se ha traducido en unos menores ingresos por matchday. La recaudación por este concepto ha retrocedido un 32,3%, hasta 16,8 millones de libras, al haber disputado tres encuentros menos como local, lo que ha lastrado todo el resto de mejoras.

Los derechos de televisión subieron en el citado período un 5,4%, hasta 29,1 millones de libras, gracias esencialmente a la entrada en vigor del nuevo contrato de la Premier League, que incluso ha permitido compensar su ausencia en competiciones europeas. El negocio comercial alcanzó los 74,3 millones de libras entre julio y septiembre, un 4,4% más, tras firmar a EA Sports, TAG Heuer, Apollo y Virgin Money.

"Estamos contentos de que nos mantengamos en el camino de generar ingresos récord para el próximo año. Durante el trimestre añadimos a nuestro equipo a varios jugadores de gran calidad, lo que demuestra una vez más nuestra determinación de desafiar los trofeos", ha enfatizado Woodward ante los inversores.

El grueso del gasto lo sigue concentrado la masa salarial, donde los salarios subieron un 5,8%, hasta 62,3 millones de libras en el primer trimestre. Las amortizaciones, fruto de las adquisiciones de jugadores como Eric Bailly, Zlatan Ibrahimović, Henrikh Mkhitaryan y Paul Pogba, se dispararon un 38,7%, hasta 30,8 millones de libras. El resto de costes operativos ascendieron a 26,7 millones de libras, un 15,6% más.

Estas inversiones en fichajes también han supuesto un aumento de la deuda neta, que a 30 de septiembre de 2016 se situaba en 337,7 millones de libras, un aumento de 51,5 millones y que el club asegura que se debe "principalmente al impacto de los movimientos del tipo de cambio en nuestra deuda denominada en dólares y la disminución de efectivo", ya que la disposición de tesorería bajó en 64 millones de libras.