El Sevilla FC bate su récord: 195 millones en ingresos y beneficio de 23,5 millones

El Sevilla FC ha vuelto a hacer valer un modelo de negocio que empieza a ganar adeptos en LaLiga. El club hispalense alcanzó los 195 millones de euros en ingresos durante la temporada 2016-2017, de los 56,67 millones correspondieron a plusvalías por traspasos de futbolistas. Se trata de la cifra más alta en su historia reciente y clave para apuntalar un beneficio neto récord de 23,49 millones de euros. Para este año, prevén superar los 200 millones de facturación por primera vez.

Se trata de un modelo de negocio no exento de riesgo, pero que en las oficinas del Ramón Sánchez Pizjuán han aprendido a controlar. Durante los últimos cuatro ejercicios, tanto la facturación ordinaria, como los ingresos por venta de jugadores y el beneficio neto han crecido de forma sostenida. Además, con la introducción de un matiz interesante: se ha acelerado la inversión en plantilla para no perder competitividad e intentar consolidarse en Champions League.

Los costes laborales del club alcanzaron prácticamente los 100 millones de euros en 2016-2017, un 14,2% más, mientras que las amortizaciones de inmovilizado se dispararon un 39,8%, hasta 27 millones. Es la cifra más alta de su historia, en línea con el aumento del valor de sus activos, que en el caso de la plantilla ha pasado de 47,74 millones a 76 millones de euros. “Es la cuarta plantilla de mayor coste del fútbol español”, valora la entidad sobre el esfuerzo de inversión en el primer equipo, que costó 116 millones.

El consejo, presidido por José Castro, también valora en la memoria anual que “la generación de resultados y el fortalecimiento patrimonial que su distribución a reservas implica han llevado a una muy favorable situación financiera”. Traducido en números, significa que no existe deuda financiera neta y que en caja contaban con 35,98 millones al cierre de 2016-2017.

Por líneas de negocio, la televisión explica el fuerte aumento de los ingresos ordinarios, pues su parte del pastel prácticamente se dobló, hasta 71,07 millones de euros. El acceso a la Champions League impulsó los ingresos por abonados, hasta 13,97 millones, mientras que la venta de entradas y los cobros de Uefa retrocedieron un 11%, hasta 39,03 millones. Pese al efímero patrocinio principal de Puerto Rico, el área comercial creció un 9,1%, con 13,6 millones.

Sobre el aumento de los costes de explotación y aprovisionamiento, el consejo de administración recuerda que la centralización de los derechos audiovisuales conlleva una serie de gastos asociados que se deben introducir en la cuenta de resultados, como la ayuda al deporte aficionado o los propios pagos para el funcionamiento de LaLiga.