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El Real Madrid paga 29,5 millones a Mediapro y Bankia para recuperar sus derechos de imagen

M.M.A.

16 sep 2015 - 04:57

El Real Madrid ha decidido poner fin a una situación singular entre los grandes clubes de Europa. El conjunto presidido por Florentino Pérez ha aprovechado su buena posición financiera para recomprar a Mediapro y Bankia su participación del 12,5% y del 7,5% en Real Madrid Gestión de Derechos, respectivamente, por 29,5 millones de euros. La operación ya fue adelantada por Palco23 el pasado 18 de marzo, pero este medio ha podido averiguar ahora el precio pagado a sus socios en esta sociedad creada en 2004 para la explotación comercial de la marca merengue.

 

El importe de la operación aparece en el informe económico de la temporada 2014-2015, que Pérez presentará este sábado en la asamblea de compromisarios y al que ya ha podido acceder Palco23. Fuentes de la industria indican que esta compraventa tiene todo el sentido, especialmente si se aprecia que el mayor incremento de ingresos del Real Madrid a futuro se producirá en el área de marketing y que ya no necesita socios externos para su explotación.

 

Con la estructura actual, Bankia, Mediapro y Prisa, que ya vendió su paquete accionarial del 10% en la 2013-2014, se aseguraban un porcentaje de esos ingresos. Las fuentes consultadas recuerdan que, en su momento, aquella operación tenía toda la lógica del mundo: se vendía por unos 90 millones de euros (entonces, unos 14.5000 millones de pesetas) unos derechos que entonces valían cero porque el Real Madrid no había empezado a activar realmente su marca, mientras que ahora se ha aprovechado la buena posición de tesorería y balance para recuperar el 100% del "negocio de explotación conjunta de una parte de los derechos de merchandising, imagen del club y jugadores, Internet y distribución".

 

Real Madrid e Ipic sellaron ayer su alianza.
Ipic ha sido el principal acuerdo de patrocinio cerrado por el Real Madrid en la última temporada.

 

La liquidación de la sociedad podría verse como un paso lógico, a tenor de los avisos de EY, auditor del club, en las cuentas presentadas cada temporada, donde llamaba la atención de que el grueso del negocio se hacía con sus propia participada. Además, provocaba unos gastos de gestión superiores al medio millón de euros por la subcontratación de servicios. La junta directiva recuerda que la facturación de esta mercantil ahora extinguida fue de 102,47 millones en la temporada 2013-2014, ejercicio en el que el área de marketing facturó 170,65 millones.

 

La buena situación patrimonial del Real Madrid también ha permitido a Pérez amortizar prácticamente de golpe esta inversión, sin que ello haya impedido una mejora del beneficio neto (de 38,33 millones a 42,02 millones). "Estos derechos se amortizan en el periodo que restaba para la reversión de dichos derechos al Club, esto es, 1,3 y 1,7 años", indica la memoria. En un principio el acuerdo era por diez años y debía concluir en 2014, pero las partes acordaron extenderlo dos años más para que Bankia, Mediapro y Prisa pudieran recuperar su inversión.

 

El club indica en su informe que esta "inversión no recurrente" de recompra de derechos de explotación explica por qué su nivel de tesorería se desplomó un 37,4% al cierre del ejercicio 2014-2015, al pasar de 174 millones a 109 millones de euros. Se trata de la posición de tesorería más baja desde 2011, pero es que en este ejercicio también se han incluido primas por 16 millones de euros, en concepto de la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes, en fútbol, y la Euroliga, en baloncesto.

 

A lo que sí ha afectado esta compraventa de derechos es al calendario de vencimientos de la deuda bancaria que mantiene la entidad de Concha Espina. El club debía amortizar 14,16 millones al cierre de la campaña 2014-2015, pero los compromisos con entidades de crédito sólo han bajado de 89,59 millones a 82 millones de euros. Además, con el nuevo esquema han logrado evitar un primer vencimiento de 54 millones este ejercicio, posponiendo a la 2018-2019 el primer gran desembolso (42 millones); el segundo, de 40 millones, llegará en la 2020-2021.

 

 

 

¿Qué acuerdos gestionaba esta sociedad?

 

Durante la última temporada, la primera en la que el Real Madrid ha vuelto a contabilizar todos sus ingresos de forma directa, la cifra de negocio por comercialización y publicidad se situó en 208,082 millones de euros, lo que supone un incremento del 21,9% respecto a la campaña anterior.

 

Este  fuerte incremento se debe, sobre todo, a la firma de International Petroleum Investment Company (IPIC) como nuevo patrocinador para las próximas tres temporadas, con opción a dos adicionales. "Asimismo, en dicho acuerdo se contempla la posibilidad de que IPIC pueda hacerse con el naming right del Estadio para futuras temporadas, en cuyo caso la remuneración a percibir y el plazo de duración serían significativamente superiores", admiten en la memoria. POr otro lado, y como ya avanzó Palco23, "el contrato ha sido parcialmente cedido por IPIC a Cepsa", grupo petrolero de origen español y controlado por este fondo de Abu Dhabi.

 

Entre los acuerdos que se gestionaban a través de esta sociedad están el patrocinio de la camiseta que en su día se firmó con Siemenes y BenQ, del que aún quedaban saldos por cobrar tras el concurso de acreedores de la compañía. También se gestionaba vía Real Madrid Gestión de Derechos el contrato vigente con Emirates hasta la temporada 2017-2018, así como el de Adidas hasta la campaña 2019-2020, por el que no sólo se incluye el acuerdo de proveedor técnico, sino que además se le cedía la explotación de productos licenciados a cambio de un canon mínimo que no se especifica.

 

También es a través de este vehículo societario mediante el que se firmó un acuerdo con la sociedad luxemburguesa Rak Marlan Island Football, por el que debía construirse un gran parque temático en los Emiratos Árabes Unidos (EAU) que debía estar inspirando en el último campeón de la Champions League. Sin embargo, como admitió el propio presidente, Florentino Pérez, en la última asamblea de socios, ese proyecto finalmente ha quedado aparcado ante los problemas de su socio para encontrar la financiación necesaria.