El Real Madrid Baloncesto reduce un 8,4% sus pérdidas por la mejora de las ventas y la derrota en la Final Four

Facundo Campazzo. Fuente: ACB Photo. E. Cobos

El baloncesto europeo ha demostrado que, en términos económicos, la competitividad de un equipo está reñida con la rentabilidad, y el Real Madrid ha vuelto a ser un ejemplo de ello. El club blanco, que ganó la ACB y alcanzó las semifinales de la Euroliga, registró unas pérdidas de 26,4 millones de euros en 2018-2019, según reflejan las cuentas de la sección a las que ha tenido acceso Palco23.

Pese a que los números rojos son una realidad, este registro refleja dos aspectos favorables. El primero es que el desfase presupuestario de la sección se redujo más de lo que la dirección había previsto. El segundo, que los números rojos cayeron un 8,4% respecto a la campaña anterior por el descenso del coste de la plantilla hasta 30,3 millones de euros, un 9,6% menos.  

Aquí tuvo un notable impacto que no se ganara la Euroliga, porque no se repartieron primas tan elevadas, pasando de 6,3 millones a 4,3 millones de euros. Además, también se produjo la salida de Luka Doncic. Por todo ello, en una temporada en que el Real Madrid mantuvo el bloque, se gastó 3,3 millones de euros menos en nóminas deportivas. Además, el club invirtió menos en reforzar la plantilla, ya que las amortizaciones por fichajes se redujeron a la mitad, hasta un millón de euros.

El Real Madrid gastó 30,3 millones de euros en sueldos y salarios a la plantilla deportiva, y para 2019-2020 ha presupuestado la misma inversión

A su favor ha jugado que el club ha batido el récord de ingresos ordinarios, con unas ventas de 15,97 millones de euros, un 3,2% más que el año anterior y un 25,1% más de lo presupuestado el pasado verano. La clave estuvo en el incremento del 14,4% en el negocio del ticketing y la venta de abonos, hasta 5,4 millones de euros.

El patrocinio fue la principal fuente de ingresos de la sección, con un total de 6,8 millones de euros, una cantidad parecida a la de 2017-2018. El club preveía que la publicidad y esponsorización caería hasta 5,3 millones, pero finalmente reactivó la oficina comercial y remontó el vuelo. Y más que prevé hacerlo en 2019-2020, ya que con la entrada de Palladium como espónsor principal espera facturar un 9,9% más, y alcanzar unas ventas comerciales nunca vistas en la sección, con un total de 7,5 millones de euros.

Una partida que si aumentó fue la de los derechos audiovisuales, por la renovación de la ACB con Movistar+ hasta 2021. El club merengue cobró 2,2 millones de euros por este concepto, un 24,1% más que en el año anterior, y un 36% más de lo presupuestado. Eso sí, la no revalidación del título de Euroliga provocó que los ingresos por competiciones internacionales cayeran un 33,4%, hasta 1,2 millones de euros.

Para la campaña 2019-2020, el equipo dirigido en los despachos por Juan Carlos Sánchez prevé asumir unas pérdidas de 27,9 millones de euros, un 5,4% más, debido a que estima que gastará un 5,8% más en personal deportivo y administrativo. Esta partida contará con un presupuesto de 34,2 millones de euros, dos millones más que la temporada anterior.

La sección se muestra pesimista respecto a su capacidad de generar ingresos a través de amistosos y la Euroliga. De hecho, calcula que los ingresos por esta vía caerán un 36%, hasta 818.000 euros.                La recaudación por socios y ticketing disminuirá un 4,7%, hasta 5,2 millones de euros, mientras que la facturación televisiva será de 2,26 millones, aproximadamente 300.000 euros menos que en 2018-2019. En otras palabras, la única partida que el club confía en incrementar es la de márketing, que representarán el 47% de los ingresos esperados por la sección, que serán de 15,8 millones de euros en 2019-2020.

Son cifras alejadas de la mayoría de equipos de la ACB, con la salvedad del FC Barcelona, que al igual que el Real Madrid cubre las pérdidas de la sección con el dinero que genera el fútbol. El Kirolbet Baskonia, por su parte, fue el segundo equipo de la ACB que superó la barrera de los 15 millones de euros en 2017-2018, pero el presupuesto para su plantilla es inferior. Como lo es el de la mayoría de equipos de LaLiga Endesa, que manejan un presupuesto deportivo que oscila los 1,5 millones y seis millones de euros.