El RC Celta marca su futuro: Balaídos a 50 años y ciudad deportiva con diez campos

“Hoy es el día más importante de estos 94 años de vida del club”, aseguraba ayer Carlos Mouriño. Y no es para menos. El presidente del RC Celta ha conseguido finalmente desencallar los dos proyectos prioritarios para el futuro, y contar con el acuerdo del Ayuntamiento de Vigo, la Diputación y la Xunta de Galicia. Se trata de la reforma definitiva de Balaídos, que finalmente costará unos 40 millones de euros, y la construcción de una ciudad deportiva 100% propia en el municipio de Mos.

Mouriño recordó que son “dos proyectos imprescindibles para que el RC Celta consolide su sueño y tenga un horizonte claro, que nos permiten ver un futuro cierto”, después de varios meses de tiras y aflojas con la clase política. Sobre el estadio, aseguró que las nuevas inversiones acordadas darán paso a “unas instalaciones próximas a lo que veníamos reclamando”, y el alcalde, Abel Caballero, ya avanzó que la inversión final se irá hacia los 40 millones de euros, diez millones más de lo previsto. La concesión será a cincuenta años.

Caballero alabó a Mouriño tras varios meses de tensión, y avanzó que entre las novedades está la construcción de nuevas cubiertas que harán que ningún aficionado se moje en días de lluvia, ni siquiera los que estén en la primera fila. Sobre el calendario de las obras, recordó que la grada de Río “a mediados de febrero ya estará terminada, y dentro de poco iniciaremos las de Marcador, Gol y el aparcamiento”. No dio muchas pistas sobre la vertiente comercial, pero el club ya dijo en su día que querría abrir una nueva tienda oficial, tres o cuatro restaurantes y, de la mano del patrocinador Luckia, un local en el que se podrán realizar apuestas.

El RC Celta y el Concello de Vigo elevan a 40 millones la inversión en Balaídos, que el club podrá explotar durante cincuenta años

En cuanto a la ciudad deportiva, la inversión podría irse hacia los 10 millones de euros sólo en equipamiento deportivo si se tiene en cuenta las actuaciones realizadas por otros equipos de LaLiga. Ahora bien, Mouriño dejó entrever que el acuerdo con la Xunta le permitirá financiar estas obras con el desarrollo de negocios terciarios alrededor de la nueva ciudad deportiva, y la inversión pública en accesos y servicios básicas ya se irá a otros 40 millones, según se comunicó ayer. “Nuestra idea es iniciar los trabajos en junio o julio del próximo año y tener preparados los campos de nuestros equipos profesionales a finales del 2018 o principios de 2019”, avanzó.

El complejo contará con “dos grandes áreas con todos los servicios necesarios para el primer equipo y la cantera”, a la que se le añadirán un pabellón y un miniestadio con capacidad para entre 7.000 y 11.000 espectadores que serviría para el filial. También incluirá cinco campos de hierba natural y otros cinco de hierba artificial, tres pistas de tenis y cuatro de pádel. En total, ocupará una superficie de 238.900 metros cuadrados, de los que sólo 56.810 metros cuadrados serán edificables.

Además, para ganarse el plácet de las dos comunidades de montes y del propio Concello de Mos, se ha acordado que haya 329.017 metros cuadrados de zonas verdes de titulación privada, de los que el RC Celta se ha comprometido a reforestar 255.362 metros cuadrados. A cambio, el Ejecutivo autonómico autorizará el cambio de usos del suelo, actualmente calificados como rústico, precisamente para que se puedan explotar comercialmente con un complejo de tiendas al aire libre que ocupará 140.000 metros cuadrados y tendrá un aparcamiento con 5.000 plazas.

Este importante plan inversor, que contará con financiación pública, se produce tras una nueva temporada en la que el equipo gallego logró cerrar con beneficios. “Tenemos una economía saneada con deuda cero desde hace tres años, dificilísima de conseguir en el fútbol actual, que nos permitió logros importantes”, enfatizó Mouriño.

Además, supondrá un nuevo paso en el aumento del patrimonio del RC Celta, que hace dos años pagó cinco millones de euros por un edificio emblemático en el centro de Vigo para construir allí su sede corporativa. La previsión es que se inaugure en la primera mitad de 2018, y allí también habrá locales de restauración y servicios para los aficionados.