El Inter cierra 2017-2018 con unas pérdidas de 17,7 millones de euros

El Inter de Milán aún está lejos de alcanzar la sostenibilidad financiera, aunque lo está más cerca que hace un año. El club italiano cerró 2017-2018 con unas pérdidas de 17,7 millones de euros, lo que supone un ajuste del 28,5% interanual. Ello, pese a que el club batió su récord de ingresos ordinarios, con 288,2 millones y un crecimiento del 7,3% respecto al ejercicio anterior. A ello se le añadieron otros 58,8 millones en plusvalías por traspasos.

A diferencia de la mayoría de clubes, la principal fuente de ingresos del equipo de la Serie A es la comercial, con 131 millones de euros. Es el triple que hace solo dos temporadas, y en buena parte se debe a la entrada del grupo chino Suning en el accionariado. Su llegada ha supuesto la venta de activos como el nombre de la ciudad deportiva y la renovación al alza de otras alianzas históricas, como la de Pirelli.

Por otro lado, la facturación por venta de abonos y entrada subió un 20,7%, hasta 33,8 millones de euros, mientras que los ingresos por televisión retrocedieron un 3,8% y se situaron en 80,2 millones de euros, según Calcio Finanza. El resto de ingresos cedieron un 2%, hasta 43,93 millones de euros, entre los que figuran 10 millones de euros por la explotación de su red de academias y por la explotación del archivo de imágenes de Rai, televisión pública del país.

En cuanto a los costes, el pago de nóminas subió un 3% y alcanzó los 156 millones de euros, mientras que las amortizaciones vinculadas a fichajes fueron un 5,9% superior, con 88,1 millones de euros. En el resto de gastos destacan los financieros, con un alza del 7%, hasta 34,5 millones, cuando los gastos operativos ya son de 69 millones.