El FC Barcelona pierde a Messi y culpa a los “obstáculos” de la normativa de LaLiga

Leo Messi no renovará con el FC Barcelona. El club barcelonés ha hecho público en un comunicado que no ha podido suscribir el nuevo contrato con el jugador y que, por tanto, “no continuará ligado al FC Barcelona”. La noticia, que supone una hecatombe para el barcelonismo y para el fútbol español, se ha hecho pública tras una larga negociación en la que el club que preside Joan Laporta ha tratado de buscar fórmulas para atar la continuidad de Messi sin incumplir el techo salarial marcado por LaLiga y muy maltrecho por la situación financiera del club.

En el escrito remitido por el club, se apunta a que “a pesar de haber llegar a un acuerdo entre el FC Barcelona y Leo Messi y con la clara intención de las dos partes de firmar un nuevo contrato a día de hoy, no se podrá formalizar a causa de los obstáculos económicos y estructurales (normativa de LaLiga española)”.

“Ante esta situación -prosigue el club-, Lionel Messi no continuará ligado al FC Barcelona”. “Las dos partes lamentan profundamente que finalmente no se puedan cumplir los deseos tanto del jugador como del club”, prosigue el club catalán, que también agradece “la aportación del jugador al engrandecimiento de la institución”.

La noticia llega en plena guerra abierta en el fútbol español por el anuncio realizado por LaLiga de dar entrada a CVC en su negocio, con la venta del 10,95% del negocio de la competición a cambio de 2.700 millone s de euros.

La marcha de Messi es un contratiempo para la venta de derechos de televisión de LaLiga

El acuerdo, al que se ha opuesto frontalmente el Real Madrid (el único club que, junto al FC Barcelona y la Juventus, continúa fiel al proyecto de Superliga), habría reportado más de 250 millones de euros a las cuentas del FC Barcelona, que en un 15% habría podido dedicar a fichas de futbolistas.

La salida de Messi trasciende en mucho el impacto deportivo para el FC Barcelona. La no continuidad del astro argentino en el fútbol español es un contratiempo importante para la venta de derechos televisivos de LaLiga, que precisamente se deben afrontar durante la temporada que da inicio este agosto.