El Espanyol pacta la salida de Roger Guasch y vuelve a crear una gran dirección general

El RCD Espanyol vuelve a salir al mercado en busca de ejecutivos. El club ha anunciado la reestructuración de su organigrama y la supresión de las dos direcciones generales que creó hace dos años: la corporativa y la deportiva. En su lugar, se volverá a crear una única dirección general, razón por la que se ha acordado la salida de Roger Guasch como responsable de todo el área de negocio.

“Ha liderado en los dos últimos años la transformación organizativa de la entidad, ha ejecutado la transformación digital y ha reorientado la potenciación de la marca del club”, valora la entidad deportiva en un comunicado. En el mismo, señala que el hasta ahora director general deportivo, Óscar Perarnau, ve rebajada su categoría a la de secretario técnico.

El Espanyol ha iniciado la búsqueda de un nuevo hombre fuerte, para el que fuentes de la industria aseguran que no se contempla a Mateu Alemany, ex director general del Valencia CF y que encajaría con el perfil que ahora se quiere recuperar. Mientras no llega ese fichaje, se ha creado una dirección interina formada por el consejero Mao Ye Wu y el vicepresidente Carlos García Pont.

La salida de Guasch se produce tras un periodo en el que las dos áreas principales del club no han trabajo tan alienadas como deberían, si bien se desconoce si esa es la razón para buscar la unificación del liderazgo del área de negocio y la deportiva. Actualmente, el club se encuentra totalmente saneado, pero ocupa posiciones de descenso a LaLiga SmartBank.

Hace unas semanas, el propio ejecutivo catalán ponía en duda los rumores sobre su inminente despido. En un encuentro con medios, aseguró que no temía por su cargo y puso en valor la gestión de todo este tiempo, que ha llevado al club a mejorar sus índices de implantación social respecto a años anteriores. Además, anunció la búsqueda de terrenos en Barcelona para construir una nueva ciudad deportiva.

El anuncio de esta nueva inversión llega tras un 2019 en el que se ha completado de forma definitiva el saneamiento. Como ya adelantóPalco23, el Espanyol de Barcelona concluyó 2018-2019 con un beneficio neto de 1,83 millones de euros y ha pronosticado unas ganancias de 20,64 millones para 2019-2020, gracias a que la facturación total se ha consolidado en torno a 100 millones de euros.

A ello, se le añade la decisión de Rastar Group de capitalizar préstamos por 50 millones de euros, de manera que los compromisos con el máximo accionista se limitarán a 13 millones de euros. A partir de entonces, el endeudamiento financiero quedará situado en torno a los 30 millones a través de bancos de inversión especializados en fútbol y cuyas garantías son los derechos de televisión.

Todos estos movimientos, unidos a la evolución en Europa League, permitirán al club disponer de doce millones de euros adicionales de límite salarial. Guasch ha avanzado que se consumirá al máximo, porque la lógica empresarial es clara: un club de fútbol vale más en Primera que en Segunda División.