El Espanyol busca terrenos en Barcelona para construir una nueva ciudad deportiva

“Hay que pensar en grande; los proyectos estratégicos deben seguir sea cual sea la situación deportiva”. Pese a los buenos resultados económicos de 2018-2019 y las previsiones para 2019-2020, el Espanyol de Barcelona es consciente de que su clasificación en LaLiga Santander marca la agenda. Pero tampoco quieren que suponga frenar planes como el anunciado hoy: la construcción de una nueva ciudad deportiva.

El director general corporativo, Roger Guasch, ha avanzado que buscan una parcela de entre siete y quince hectáreas que tengan la calificación de usos deportivos o puedan recalificarse para tal fin. El volumen de la inversión no se ha hecho público, pero operaciones similares de otros equipos situarían el importe a partir de diez millones de euros, un importe que variará en función de si se mantienen dos centros de preparación o se unifica toda en un uno solo.

El club blanquiazul está en conversaciones con diversos ayuntamientos del área metropolitana de Barcelona, aunque el ejecutivo ha admitido que “no es sencillo” dar con una parcela disponible de estas dimensiones. Eso sí, han percibido que “hay interés” por parte de los consistorios del territorio por acoger la actividad del equipo de fútbol.

El Espanyol de Barcelona reconoce que hay interés por parte de los ayuntamientos en acoger una ciudad deportiva blanquiazul

El plan definitivo no está aún dibujado, aunque el objetivo del Espanyol sí está claro: doblar el número de campos disponibles, de cuatro a ocho, y separar la actividad de la cantera de la del fútbol profesional. Es una tendencia cada vez mayor dentro de LaLiga, con tal de ofrecer servicios adicionales al primer equipo al margen de la puramente deportiva.

Esta inversión en patrimonio discurre en paralelo a intervenciones más a corto plazo que esperan desencallar con el Área Metropolitana de Barcelona (AMB). El objetivo es reordenar los espacios de la Ciudad Deportiva Dani Jarque, donde se ha invertido ya un millón de euros para desdoblar un campo de fútbol en dos, y se preparan dos millones más para construir un edificio que sustituya algunas infraestructuras temporales ante el crecimiento experimentado por el fútbol femenino.

La necesidad de un complejo de entrenamiento adicional también se debe a la actividad deportiva del Espanyol, al margen del primer equipo masculino. Guasch ha avanzado que el presupuesto del fútbol femenino se ha doblado, hasta 1,2 millones de euros, mientras que al fútbol base se lo ha dotado con un millón de euros adicional.

El plan definitivo de la ciudad deportiva no está dibujado, aunque se busca doblar hasta ocho el número de campos de fútbol

Las instalaciones actuales se encuentran en Sant Adrià de Besós, en el límite con el termino municipal de Barcelona, sobre una superficie de 60.000 metros cuadrados. A los campos de fútbol, uno de ellos con capacidad para 1.500 espectadores, se suman media docena de vestuarios, salas de prensa y audiovisual, despachos, servicios médicos, gimnasio, cafetería y tienda.

El anuncio de esta nueva inversión llega tras un 2019 en el que se ha completado de forma definitiva el saneamiento. Como ya adelantóPalco23, el Espanyol de Barcelona concluyó 2018-2019 con un beneficio neto de 1,83 millones de euros y ha pronosticado unas ganancias de 20,64 millones para 2019-2020, gracias a que la facturación total se ha consolidado en torno a 100 millones de euros.

A ello, se le añade la decisión de Rastar Group de capitalizar préstamos por 50 millones de euros, de manera que los compromisos con el máximo accionista se limitarán a 13 millones de euros. A partir de entonces, el endeudamiento financiero quedará situado en torno a los 30 millones a través de bancos de inversión especializados en fútbol y cuyas garantías son los derechos de televisión.

Todos estos movimientos, unidos a la evolución en Europa League, permitirán al club disponer de doce millones de euros adicionales de límite salarial. Guasch ha avanzado que se consumirá al máximo, porque la lógica empresarial es clara: un club de fútbol vale más en Primera que en Segunda División.