El Eibar potencia su estructura ejecutiva tras lograr un beneficio récord de 4,3 millones

El SD Eibar es conocido por muchos por disponer del estadio más pequeño de Primera División o manejarse con el presupuesto más bajo de la Liga BBVA. Pero el club armero también lidera otra estadística similar: es el club con la estructura ejecutiva más ajustada de la competición, con una docena de personas, algo que cambiará muy pronto pese a que en la temporada 2014-2015 batió todos sus registros económicos.

Alex Aranzábal, presidente ejecutivo de la entidad, recordaba el año pasado que habían confeccionado un equipo administrativo capaz de desmantelarse si no se lograba la permanencia. Tras un verano de incertidumbres, el Eibar sigue en la élite y la plantilla no sólo se mantendrá, sino que se incrementará. Y es que, como recordó el dirigente, hay clubes con estructuras que superan las sesenta personas sin que manejen un presupuesto mucho mayor.

"Habrá reajustes de plantilla, con probable incorporación de personas que nos permitan dar mayor y mejor respuesta a los nuevos retos que tenemos en distintos frentes", indicó este viernes José María Arrizabalaga, miembro del consejo de administración. Él, junto a los consejeros Mikel Larrañaga y Ricardo Aristondo, se incorporarán a un nuevo comité de dirección que tratará de rebajar la carga de trabajo de Aranzábal.

"El presidente se ha visto obligado a atender todos los frentes, trabajo tremendo que ha compaginado con su día a día y temas económicos importantes", recordó Arrizabalaga, que con este movimiento considera que se pone fin a la "crisis institucional" que se desató en verano por el despido del entonces entrenador, Gaizka Garitano. "Se ha firmado un acuerdo por los trece consejeros que garantiza la convivencia y la estabilidad social para lo que queda de mandato", añadió.

"Estaremos cerca de él, para que consuma la mayor parte del tiempo en temas que son más rentables para el club", añadió el consejero, quien detalló que habrá reuniones periódicas de este equipo de trabajo. En paralelo, se mantendrán las comisiones de trabajo específicas en las que los distintos consejeros aportan su visión y conocimiento.

Pero, ¿quiénes son los nuevos hombres que apoyarán a Aranzábal? Larrañaga es conocido por haber sido el primer alcalde de Eibar tras la dictadura de Franco, cargo al que se presentó bajo las siglas del PNV. Ingeniero técnico y profesor mercantil, está jubilado y ha ocupado diferentes cargos de designación política.

Arrizabalaga, por su parte, es ingeniero industrial por la Escuela Técnica de Bilbao, fue entrenador del club armero entre 1981 y 1984 y también ejerció como directivo entre 1992 y 1997, cuando aún no estaba obligado a convertirse en SAD. Por último, Aristondo fue directivo durante varios años del grupo cooperativista Mondragón y actualmente también está jubilado.

Aranzábal, que en principió delegará algunas competencias, quiso agradecer a las once personas que han formado su equipo en la última temporada porque "entre todos hemos tenido que hacer frente a algo desconocido: convertirnos en un club de élite. Todos han puesto de su parte mucho más de lo que se esperaba. Habiendo cometido errores, es de justicia agradecer al equipo de once personas", añadió.

Y es que, pese a todas las dificultades, el ejercicio finalizado a 30 de junio de 2015 estuvo marcado por un beneficio antes de impuestos récord, con 4,37 millones de euros. Esta cifra supera los 2,55 millones que se presupuestaron al comienzo de la temporada, pero es que prácticamente supera la cifra de negocio que manejó el club en su último año en Segunda División.

Ello ha sido posible gracias a un facturación también superior a la esperada, ya que finalmente alcanzó los 18,86 millones. Aunque en su intervención Aranzabal no precisó muchos datos, todo apunta a que un elemento que ha favorecido a esta mejora es la venta de Raúl Albentosa en el mercado de invierno y por el que percibió 600.000 euros.

En total, se han ingresado tres millones más de lo que se esperaba, aunque habrá que esperar a la próxima junta de accionistas para conocer con detalle dónde se han producido esas desviaciones positivas. "El club se encuentra en una situación muy saneada y no necesita vender jugadores", recordó Aranzábal, ya que la deuda ni siquiera alcanza los tres millones.