El CD Numancia gana 2,5 millones en 2018-2019 y asume un descenso de ingresos

El CD Numancia cambió de dueño a finales de 2018, pero su modelo de negocio no cambia. El club cerró 2018-2019 con un beneficio neto de 2,5 millones de euros, muy por encima de lo previsto, tras lograr unos ingresos récord de 11 millones de euros. De momento, el consejo de administración no ha señalado si volverá a repetir reparto de dividendos, como ha hecho en los últimos tres años.

La junta aprobó ayer las cuentas, puesto que arrojan “un saldo positivo importante que viene a consolidar el modelo de gestión desarrollado”, según señaló el equipo de LaLiga SmartBank en un comunicado. Con este ya son catorce de los últimos quince años los que se han cerrado con ganancias. Y la previsión es mantener la tendencia en 2019-2020, con un resultado neto previsto de 1,3 millones.

Este descenso del 50% respecto al último año responde a una combinación de factores: caída de ingresos y mantenimiento del esfuerzo inversor en plantilla, con un límite salarial que este ejercicio es de 5,29 millones. El Numancia anticipa que sus ingresos bajarán a 9,7 millones de euros, un descenso de 1,3 millones que especialmente atribuyen al menor importe que recibirán por sus derechos de televisión.

El Numancia ha cerrado 14 de los últimos quince años con un balance positivo 

Con una implantación social ya limitada, que le penaliza en el reparto del 25% de la factura audiovisual, el club ahora se verá también afectado por sus resultados. En 2017-2018 quedó sexto, lo que le benefició de forma importante, mientras que el año pasado se libró del descenso por un escaso margen tras finalizar decimoséptimo.

Moisés Israel, presidente y máximo accionista del CD Numancia, explicó a los accionistas que siguen trabajando en abrir nuevas fuentes de ingresos. El club mo tiene actualmente patrocinador principal, pero desde hace meses trabaja en “la búsqueda de una mayor expansión internacional y con las acciones encaminadas a tener mayo impacto fuera de nuestras fronteras”. También se ha inaugurado una academia internacional para atraer a futbolistas extranjeros que buscan formarse en España mientras completan sus estudios.

Desde finales de 2018, la propiedad del club soriano está en manos de Moisés Israel Garzón y Francisco Velázquez, que adquirieron la participación del 95,7% a Francisco Garcés. Posteriormente, ya han recuperado parte de su inversión con la distribución de 5,1 millones de euros en dividendos.