El CB Estudiantes abre la veda de los Ertes en la ACB por la crisis del coronavirus

E Candel. ACB Photo.

El CB Estudiantes presenta un Erte por la crisis del coronavirus. El club colegial ha comunicado a sus empleados que pondrá en marcha un expediente de regulación temporal de empleo sobre su plantilla, compuesta por más de 200 personas entre personal directivo y cargos intermedios, técnicos, monitores y personas de oficina. La decisión ya está tomada y se ha hecho saber a plantilla, aunque, según ha sabido Palco23, aún no ha decidido si esta decisión se extenderá al primer equipo masculino. 

“No nos hemos querido precipitar y al final hemos decidido que el procedimiento afectará a la estructura; lo que no tenemos claro es si también a la plantilla deportiva, porque si lo ejecutamos y no se suspende la temporada, temíamos que los jugadores tuvieran libertad para no regresar”, explica Fernando Galindo, presidente del club, a este diario. “Si la liga se retoma, nos gustaría contar con todos los jugadores para encarar la temporada, y teníamos dudas de si los jugadores estaban obligados a volver”, apunta. 

La legislación establece que los jugadores con contrato sí que tendrán que incorporarse si la Liga Endesa se reanuda, pero el club quiere aclarar todas las dudas para valorar las consecuencias que podría tener en caso de que la temporada se retome, por lo que se tomará una decisión durante la próxima semana.

Todos los entrenadores y monitores del CB Estudiantes cotizan en en la Seguridad Social

No es el único club de la ACB que está estudiando presentar un Erte en la primera plantilla. “Es una cuestión de responsabilidad y de garantizar la viabilidad del club a futuro”, explica otro director general de un club que milita en la Liga Endesa. El Monbus Obradoiro y Montakit Fuenlabrada también están entre los primeros equipos de la ACB que están dando pasos hacia esta dirección, aunque otro director general de un equipo de ACB afirma que, en mayor o menor grado, todos los directivos se lo están planteando.

De momento, el Estu ha puesto en marcha un ERE temporal en todo aquel personal que no trabaja con la primera plantilla. “Tenemos más de 2.000 canteranos que son entrenados por técnicos y monitores de deporte escolar que están dados de alta en la Seguridad Social; es buena parte de nuestra estructura y, con el cese de la actividad y las escuelas, no podíamos mantenerles”, apunta Galindo.

Entre el club profesional y la entidad, que atiende a la cantera y al deporte escolar, el Estudiantes cuenta con un presupuesto estimado de 6 millones de euros, de los cuales menos de la mitad se destina al primer equipo masculino y femenino, que milita en Liga Femenina 2. El resto se destina a cubrir los gastos de estructura y de mantenimiento de las instalaciones de entrenamiento. El alquiler del WiZink Center y el gasto en viajes se contabiliza en el presupuesto del equipo profesional. 

En paralelo, Movistar Estudiantes está trabajando en la ampliación de capital que aprobó el noviembre, y que espera cerrar a mediados de abril. Aunque el objetivo es levantar cinco millones de euros, fuentes del club se muestran confiados en captar al menos cuatro millones de euros. Se está trabajando en dos vías: la primera es dar entrada a socios que anteriormente no tenían acciones, que es la vía que más gusta al club porque permite diluir las participaciones del resto de accionistas y atomizar el capital.

La segunda es que varios inversores entren en el capital con participaciones más relevantes, lo que los ha llevado a firmar convenios de confidencialidad con seis grupos que están negociando su entrada en el capital. No ha trascendido la identidad de estos potenciales accionistas, pero entre una vía y otra el club confía en alcanzar los cuatro millones de euros. Aunque en un primer momento esperaba cerrar la ronda en febrero, el club amplió dos meses más, hasta abril, el plazo para invertir, ante el interés de grandes inversores en participar en la operación.