El Bilbao Basket aprueba un presupuesto de 3,6 millones y la ampliación de capital

Los accionistas de Bilbao Basket aprueban una ampliación de capital de 1,2 millones de euros para estabilizar la situación financiera del club. Este incremento del capital social, que se realizará mediante la emisión de 108.000 acciones que sólo podrán adquirir los socios actuales. De este modo, parte de esos recursos se destinarán al pago de la deuda privilegiada de tres millones de euros, que se empezará a pagar en verano de 2020.

De este modo, ese pago no figurará en el presupuesto de este año, sino en el de 2020-2021. Esa cantidad se reparte entre 2,34 millones de euros que se deben a Hacienda, 496.000 euros a Caja Rural y 235.000 euros a Fogasa. El pago con la Agencia Tributaria se abonará en seis años, mientras que con Caja Rural hay un acuerdo verbal para saldar la deuda en cuatro años. Con Fogasa, el acuerdo es a cinco años.

“Lo que perseguimos es seguir la hoja de ruta que tenemos dibujada a partir de la entrada en situación concursal, la salida del mismo y el ascenso a ACB”, ha explicado Carlos del Campo, consejero del Bilbao Basket. Los accionistas han aprobado un presupuesto de 3,6 millones de euros y las cuentas de la pasada temporada, en la que el primer equipo compitió en LEB, con unos ingresos de 1,7 millones de euros. El beneficio previsto para 2019-2020 será de 440.000 euros, una cifra que está muy por encima de las pérdidas de 2,6 millones de la temporada 2017-2018, cuando el equipo descendió.

El Bilbao Basket ha aprobado un presupuesto de 3,6 millones de euros para 2019-2020 y un beneficio de 440.000 euros

“Es un presupuesto que permite hacer frente a los compromisos de devolución de deuda, que hemos reducido a la mitad”, ha afirmado el directivo, sobre la reducción de seis a tres millones de los compromisos pendientes de pago con Hacienda, Caja Rural y Fogasa. “Un 20% del presupuesto se destinará a la deuda”, ha añadido.

Sobre la ampliación de capital, el consejero ha comentado que “es un paso importante para nosotros; no estaremos tutelados por nadie, la gente que esté en los órganos de gobierno de este club lo hará porque tiene en su poder las acciones suficientes para tener mayorías que les permiten determinar qué consejo de administración gobernará”.

Asimismo, Del Campo ha incidido en la necesidad de que el club genere ingresos propios. “El discurso de que no hemos tenido apoyo de las administraciones públicas no es verdad, es un discurso fatalista que no nos lleva a ningún lado”, ha apuntado, al asegurar que “lo que tenemos que alcanzar son mil abonados más en el plazo de dos años para tener unos ingresos de 350.000 euros más, ser capaces de vender más taquillaje e ir creciendo en patrocinio”.

En este sentido, el directivo ha asegurado que “es muy difícil de encontrar un gran patrocinador que nos salve la vida”, y que, por ese motivo, el Bilbao Basket ha estado trabajando en la línea del micro patrocinio, con espónsors que realizan pequeñas aportaciones de capital que ayudan al club. “Si conseguimos tener cien empresas de este calibre, obtendremos mucho dinero”, ha admitido.