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El Barça anuncia elecciones con un tercio de ingresos en el aire

Palco 23

8 ene 2015 - 05:00

La crisis deportiva que afecta al FC Barcelona se ha acabado trasladando a la esfera institucional. El presidente del club, Josep Maria Bartomeu, anunció ayer la convocatoria de elecciones para finales de esta temporada y con la aspiración de mantenerse en el cargo. El anuncio llega en un momento delicado, por las críticas de la afición, pero también porque el club se encuentra negociando tres contratos que suponen más de un tercio de sus ingresos anuales.

 

Bartomeu, que asumió la presidencia en enero de 2014 en sustitución del dimitido Sandro Rosell, debe decidir en los próximos días o semanas qué empresa se adjudicará los derechos de televisión para la campaña 2015-2016, la última en la que cada club podrá negociar de forma individual. El área económica, liderada por el vicepresidente Javier Faus, asume que tiene todo el sentido del mundo renovar con Mediapro, que actualmente paga 140 millones de euros cada año, aunque la propuesta de Telefónica también interesa por dos motivos: es un operador de telecomunicaciones y tiene muchas más herramientas para difundir los contenidos por Internet y su potencial económico lo sitúan como uno de los favoritos para la compra de los derechos audiovisuales cuando la Liga de Fútbol Profesional (LFP) centralice su venta.

 

Aunque el todavía máximo mandatario aseguró que la maquinaria no se parará en las oficinas del Camp Nou por el anuncio electoral, también está por ver en qué condiciones se acaba renovando el acuerdo de patrocinio con Nike, que vence en 2018 pero que el Barça quiere modificar ya al alza. El club percibe actualmente 54 millones de euros por temporada, entre los 30 millones de la camiseta y otros 24 millones por royalties derivados de la gestión de las tiendas del Barça por parte de la multinacional textil. Se trata de una cifra muy lejana en comparación a los 94 millones de euros que Adidas pagará al Manchester United, un club con muchos menos éxitos deportivos en la última década pero con una fuerte imagen de marca en Asia y Norteamérica.

 

El último gran acuerdo, y este sí que probablemente se verá entorpecido por la contienda electoral es el del patrocinador principal de la camiseta. Bartomeu contrató a la multinacional de márketing deportivo IMG para que buscara alternativas a Qatar Airways, que hoy paga unos 35 millones de euros por campaña, ante la mala imagen que se ha labrado el emirato del Golfo por la polémica sobre la adjudicación del Mundial de Fútbol 2022 y las condiciones laborales de algunos de sus ciudadanos.

 

Cualquier cambio de marca será sometido a la asamblea de compromisarios, que acostumbra a celebrarse después del verano, pero además también tendría que poder contar con el visto bueno de los otros aspirantes a la presidencia del Barça a partir de la temporada 2015-2016. Las elecciones están previstas para finales de junio de este año, por lo que la elección del nuevo sponsor podría demorarse más tiempo del previsto y las complicaciones institucionales del cambio de negociadores podría echar atrás a algunas de las empresas interesadas. Durante el proceso electoral, el club estará regido por una junta gestora que en principio presidirá Ramon Adell, presidente de la comisión económica.

 

La resolución con éxito de estos tres interrogantes puede ser una de las armas a favor de Bartomeu en la campaña electoral que se abrirá cuando finalice la Liga BBVA, ya que en las oficinas azulgranas son conscientes de que mucho tienen que cambiar las cosas sobre el terreno de juego para que la parcela deportiva no sea su talón de Aquiles frente al resto de aspirantes. "Pido a los futuros candidatos que actúen con responsabilidad, que hasta llegar a la campaña haya fair play", señaló ayer Bartomeu en rueda de prensa, tras admitir que la decisión la había tomado ese mismo día tras consultar con algunos miembros de la junta directiva.

 

El anuncio del avance electoral un año antes de lo previsto se produce en plena tormenta deportiva, con la destitución del director técnico, Andoni Zubizarreta, y los rumores sobre la mala relación entre Messi y el entrenador, Luis Enrique Martínez. Además, el Tribunal Administración del Deporte (TAS) ha ratificado la sanción que impuso la Fifa al club por el incumplimiento de la norma sobre traspaso de menores y por la que el Barça ha quedado vetado en el mercado de fichajes hasta enero de 2016.

 

Bartomeu, acuciado también por la imputación por posible fraude fiscal en el fichaje de Neymar, volvió a insistir en que la sanción de la Fifa es "desproporcionada" e incluso se atrevió a advertir que rompe las relaciones institucionales con el máximo organismo del fútbol mundial hasta que se ponga fin a la sanción. Además de enviar una carta "dura" de queja a su presidente, Joseph Blatter, el dirigente también ha decidido que no acompañará a Messi a la gala del Balón de Oro. "El club sufre una tensión desmesurada que hay que rebajar", defendió ayer Bartomeu.

 

Por ahora se desconoce quién más concurrirá a los comicios junto a Bartomeu, más allá de Agustí Benedito, segundo en las elecciones de junio de 2010 y que ahora aspiraría al triunfo. El expresidente Joan Laporta tomará una decisión en los próximos meses, mientras que Víctor Font, que formó parte de la candidatura de Marc Ingla hace cuatro años y medio también medita si salta al ruedo electoral.