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Cara y cruz para el Rayo Majadahonda: ascenso con pérdidas

El club de Madrid utiliza el mismo estadio donde entrena el Atlético de Madrid, que se encarga de los gastos de gestión y mantenimiento.

Albert Ferrer

25 may 2021 - 04:53

Cara y cruz para el Rayo Majadahonda: ascenso con pérdidas

 

 

El Rayo Majadahonda termina la temporada 2020-2021 con una de cal y otra de arena. El conjunto rayista, que presupuestó ingresar 2,5 millones de euros en la actual temporada, no podrá llegar a la cifra pese a haber ascendido a la nueva Primera RfefDebido al aumento de gastos y al impago de más de 80.000 euros por parte de un patrocinador, el club cerrará el ejercicio en números rojos, aunque desde la entidad aseguran que “no será una cantidad irrecuperable”.

 

El equipo madrileño, que descendió de LaLiga Smartbank hace dos temporadas, consiguió cerrar el ejercicio 2019-2020 con un superávit de 500.000 euros, debido en gran parte a las ayudas aportadas por la Real Federación Española de Fútbol (Rfef) y LaLiga a los clubes que pierden su categoría dentro del fútbol profesional.

 

Para poder cerrar el ejercicio de un año anómalo como fue el del Covid-19 en números negros, la entidad, que cuenta con 60 trabajadores, aplicó un expediente de regulación de empleo (Erte) desde el primer día que cerraron los colegios en Madrid. “A diferencia de muchos clubes, vimos la situación que venía y nos adelantamos para curarnos en salud”, explica Álvaro Gómez, director general del club, a Palco23.

 

 

 

 

Junto con el Erte, el club llegó a un acuerdo con los jugadores de la primera plantilla para que aceptasen una rebaja salarial, que terminó siendo del 7%, de manera que la entidad ahorró cerca de 60.000 euros en nóminas.

 

Pese a mantener cerrado de cara al público durante muchos meses el Cerro del Espino, el club ha podido mantener estabilidad en sus cuentas ya que, según el ejecutivo “los abonos nunca han sido un aspecto fundamental, como ocurre en algunos clubes de Primera”, destaca.

 

Los ingresos del club de Majadahonda se dividen en cinco áreas: publicidad y patrocinios, fútbol base, abonos, convenio con el Atlético y competición. De todos ellos, la entidad ingresa más de 200.000 euros de cada uno, exceptuando los abonos, que no llegan a 50.000 euros.

 

Pese a las dificultades económicas que ha supuesto la pandemia para las empresas patrocinadoras y colaboradoras del club, “el Rayo Majadahonda ha ganado más patrocinadores en estos momentos complicados”, agradece Gómez.

 

 

 

 

Aun así, tras haber ingresado más de 100.000 euros en concepto de patrocinios y casi 18.000 euros provenientes de la Rfef por patrocinar al club, sigue existiendo un vacío de cerca de 80.000 euros por parte de uno de los patrocinadores.

 

Se trata de una cadena hotelera de las Islas Canarias que, con los cierres del turismo, no ha podido hacer frente a sus pagos con el club y ha aplazado su pago con el Rayo Majadahonda sine die.

 

En 2019, el jugador del Real Oviedo Alejandro Arrribas, que estuvo en el Rayo Majadahonda desde los ocho años hasta los 19, se convirtió en máximo accionista de la entidad. “El club ha seguido subsistiendo a través de los ingresos propios, y no se ha echado mano de su inversión; por suerte, no tenemos ninguna deuda”, cuenta orgulloso el director general de la entidad.

 

 

 

 

El Rayo Majadahonda, que cuenta con un modelo híbrido entre productor de talento y carácter competitivo, está desarrollando una serie de programas para producir mejores jugadores que puedan terminar saliendo a clubes de mayor envergadura, como es el caso de Rodri Hernández (hoy en el Manchester City), Marcos Llorente (del Atlético de Madrid) o los hermanos Theo y Lucas Hernández (Milán y Bayern de Múnich).

 

En este sentido, el club ha implantado un programa de entrenamientos personalizados de alto rendimiento que se reservan para los jugadores con mayor proyección. Asimismo, la entidad también está terminando de llevar a cabo la apertura de una academia internacional en la propia ciudad madrileña, donde acogerá talento de distintas partes del mundo para diversificar su cantera y crecer en popularidad en otros países.