Cara y cruz en la ACB: el Ourense logra el dinero para ingresar en el torneo y el Burgos se queda fuera

Cara y cruz en la pelea de dos equipos por lograr administrativamente el ascenso a la ACB que lograron en la cancha. La patronal anunció ayer que el CB Tizona Autocid Ford Burgos no ha sido capaz de reunir los dos millones de euros que necesitaba para formalizar su inscripción. La organización presidida por Francisco Roca asegura que el equipo ni ha presentado "toda la documentación requerida ni abonado todas las cantidades estipuladas para su inscripción en la competición".

El conjunto burgalés necesitaba captar dos millones entre aficionados y empresas locales, una cuantía que iba a verse complementada con 1,1 millones de euros que aportarían el Ayuntamiento y la Diputación en concepto de patrocinio. Este nuevo ascenso frustrado supone un duro revés para el club que preside Miguel Ángel Benavente, ya que es la tercera temporada consecutiva en la que ven frenado su estreno en la ACB por problemas económicos. Su plaza ha sido ofrecida al  Gipuzkoa Basket Club, que acabó penúltimo la campaña.

Mejor suerte ha corrido el Club Ourense, que sí "a presentado la documentación requerida para su afiliación a la ACB y ha efectuado el ingreso correspondiente para su inscripción". No obstante, su presencia en la máxima competición del baloncesto español aún no está asegurada, ya que ahora "se abre un plazo que finaliza el próximo día 30 de junio de 2015 para aportar el informe de auditoría" y que será determinante para la confirmación definitiva.

La entidad gallega ha logrado el respaldo del Ayuntamiento y la Diputación de Ourense, que han aportado los avales necesarios para que Abanca concediera un crédito de unos tres millones de euros para cumplir con todas las peticiones de la ACB: 50.000 de cuota de participación, 450.000 de la adecuación del canon que pagó el club hace 14 años, 300.000 del aval para responder a posibles incumplimientos y 1,5 millones como garantía de ascensos y descensos.