CA Osasuna dobla el beneficio previsto tras recortar el gasto en nóminas

CA Osasuna ha logrado que su regreso a Segunda División no suponga una pérdida de su sostenibilidad. El club navarro cerró 2017-2018 con un beneficio neto que prácticamente dobló al presupuestado, con 8,62 millones de euros. Esta fuerte mejora respecto a la previsión inicial se explica por los importantes ingresos que obtuvo por la ayuda al descenso y los traspasos de jugadores, así como un importante recorte del gasto en plantilla.

La entidad deportiva había reservado 13,86 millones de euros para el pago de salarios deportivos, pero finalmente se consumieron solo 10,28 millones. Esa cifra se ajustó ya a lo que podrá gastarse en 2018-2019, ejercicio en el que esta partida bajará a 9,1 millones por la fuerte caída de ingresos. La cifra de negocio retrocederá un 8,4%, hasta 13,4 millones, pero a eso hay que añadir la desaparición de la ayuda al descenso (9,1 millones) y las menores plusvalías por traspasos (bajan de 6,45 millones a 3,69 millones).

El club navarro contempla estabilidad en los ingresos por competiciones y socios, que ascenderán a 455.000 euros y 3,25 millones de euros, respectivamente. Por el contrario, la factura audiovisual será un 22,9% inferior, hasta 7,1 millones, debido al peso de los resultados deportivos en el sistema de cálculo del reparto que hace LaLiga. Por el contrario, el área comercial se disparará un 49,3%, hasta 2,9 millones de euros, gracias al estreno del patrocinio principal de Kirolbet.

La reducción de los costes no será tan fuerte como la de los ingresos, de ahí que la junta directiva prevea un beneficio neto de apenas 305.000 euros. No obstante, la cifra podría acabar siendo superior si se tienen en cuenta operaciones formalizadas con posterioridad, tanto de traspaso de futbolistas como la venta de una parcela por 3,76 millones.

En el área patrimonial, el mayor reto continúa siendo la remodelación del estadio El Sadar, que se ha cifrado en 16 millones de euros. Es un proyecto en el que la entidad espera la colaboración de la Administración, y que solo ha podido plantearse ahora que la situación financiera ha mejorado tras los graves problemas de los últimos años. 

Tras la venta de los citados terrenos, la deuda neta bajó a 7,1 millones de euros en el mes de julio. “El informe recoge que el fondo de maniobra, que refleja la diferencia entre las deudas a cobrar y a pagar a corto plazo, refleja tras muchos años de signo negativo, números positivos por primera vez”, recuerda la junta directiva.