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Abanca capitaliza 35 millones al Dépor a cambio de controlar hasta el 77% del club

El banco gallego cancela sendos préstamos para dar continuidad al club, en una operación que difícilmente no le dará la mayoría accionarial hagan lo que hagan los minoritarios.

M.Menchén

13 feb 2020 - 04:57

Abanca ‘perdona’ 35 millones al Dépor a cambio de controlar hasta el 77% del club

Juan Carlos Escotet, presidente de Abanca, junto a Fernando Vidal, presidente del RC Deportivo, en la presentación del acuerdo inicial el pasado enero.

 

 

El fútbol español tendrá próximamente un nuevo accionista de referencia en el mapa. El RC Deportivo ha puesto en marcha una ampliación de capital con la que Abanca capitalizará préstamos por 35 millones de euros, a cambio de un paquete de acciones equivalente al 77% del club. Es un porcentaje que sólo se verá reducido en la medida en que los socios minoritarios acudan a la compra de acciones a la que tienen derecho para no diluirse. Si todo el papel se vendiera, obtendría 35 millones más.

 

La reestructuración es mayor de lo anunciada inicialmente por el nuevo presidente, Fernando Vidal, ya que a principios de enero se planteó una aportación de 4,99 millones por parte del banco gallego y una ampliación de capital posterior de 10,29 millones abierta a todos los propietarios. Ahora, en cambio, se plantea esencialmente un fuerte recorte de deuda a cabio de ceder el control a su principal acreedor.

 

Los socios votarán este plan el próximo 16 de marzo, si bien el margen de maniobra es escaso ante el elevado endeudamiento del Dépor y los riesgos de descenso a Segunda B que aún existen. El consejo de administración recuerda que el crédito de 4,99 millones firmado el 2 de enero se destinó a “incrementar su tope salarial para asegurar su supervivencia económica y deportiva”. Desde entonces, los partidos se cuentan por victorias.

 

Pero, además, los nuevos rectores del club han acordado con la entidad financiera que rebaje de 42 millones a 12 millones de euros la deuda pendiente de cancelar por el préstamo firmado en 2017 para liquidar la mochilahistórica que acumulaba con la Agencia Tributaria.

 

Esta losa es la que más hacía peligrar la viabilidad del club, que en LaLiga SmartBank sí había podido definir un modelo de sostenibilidad, si bien con importantes restricciones en la inversión deportiva. Para 2019-2020, su previsión era ganar 1,71 millones de euros antes de este plan de reestructuración, un 23% menos respecto a los 2,2 millones de beneficio neto de 2018-2019.

 

En línea con lo previsto, los ingresos ordinarios en 2018-2019 se redujeron a un tercio respecto a 2017-2018, hasta 20,63 millones de euros, una cifra que se mantendrá en 2019-2020. ¿La razón de esa caída? La factura audiovisual bajó de 46 millones a 10,3 millones de euros, mientras que los ingresos comerciales cayeron más de un 50%, hasta 2,81 millones de euros. Sin embargo, este retroceso pudo compensarse con los 13,5 millones del paracaídas que le concedió LaLiga, y que explica el fuerte aumento de los otros ingresos de explotación.

 

El Dépor pagó cuatro millones más de deuda financiera en 2018-2019, un ejercicio que se cerró con compromisos pendientes de pago por 96,36 millones de euros, frente a 107,5 millones del año anterior. Y ahí es donde radica el problema. Los ingresos por televisión en Segunda B son prácticamente nulos y el club gallego apenas tendría capacidad de generar caja suficiente para poder cumplir pagos y luchar por su regreso al fútbol profesional al mismo tiempo.