Fitness

De Tempo a Volava, los otros Peloton: el ‘home fitness’ seduce al capital

La mayoría de las principales empresas de home fitness se han visto impulsadas por el aumento de la demanda de los entrenamientos en casa por la pandemia, por lo que han tenido que abrir rondas de inversión.              

Miquel López-Egea

10 may 2021 - 04:57

De Tempo a Volava, los otros Peloton: el ‘home fitness’ seduce al capital

 

No todo es Peloton en el boom del home fitness. Tras la pandemia, son muchas las empresas que están apostando por invertir y crecer en este segmento tras un aumento exponencial de la demanda de productos para entrenar en casa. Pese a que Peloton está en boca de todos y es el gran protagonista tras la pandemia, varios de sus competidores están captando capital tras el aumento de la demanda de estos productos y servicios, viendo su gran oportunidad para explotar su negocio.

 

El mes pasado, la start up de productos para entrenar en casa Tempo, fundada en 2015 en San Francisco (Estados Unidos) por los empresarios Moawia Eldeeb y Josh Augustin, cerró una ronda de financiación por valor de 220 millones de dólares liderada por SoftBank. En esta ronda también entraron Bling Capital, DCM, General Catalyst, Norwest Venture Partners y Steadfast Capital Ventures.

 

Con esta inyección de capital, la empresa tenía como objetivo reforzar su cadena de suministro y mantenerse al día con el aumento de la demanda de los consumidores, así como seguir adelante con sus actividades de investigación y desarrollo (I+D) y creación de contenidos. En julio del año pasado la empresa levantó 60 millones de dólares en otra ronda.

 

 

 

 

Tempo, que lanzó su home studio en febrero del año pasado, justo antes de que estallara la pandemia, multiplicó sus ventas por diez durante el confinamiento, teniendo retrasos en las entregas de entre cinco y siete semanas, un problema con el que también se encontraron sus competidores, como Peloton. Tempo está concebido como un gimnasio inteligente en casa, que se basa en el uso de sensores 3D para rastrear el movimiento de sus usuarios, contar sus repeticiones y mejorar su estado de forma.

 

Por otro lado, a finales de abril la empresa de máquinas de remo inteligentes Ergatta anunció que había cerrado una ronda por valor de 30 millones de dólares liderada Advance Venture Partners y con la participación de Greycroft, Fifth Wall, Gaingels y Hans Tung. En julio del año pasado, la empresa había cerrado otra ronda de cinco millones de dólares.

 

Además de su máquina de remo patentada, la empresa con sede en Nueva York ofrece contenido digital gamificado. Con esta ronda, prevé triplicar su plantilla de empleados, continuar con su I+D y mejorar su cadena de suministro

 

Por su parte, la start up de entrenamientos de fuerza conectados Tonal, que tiene a Stephen Curry, Klay Thompson y Serena Williams como inversores, cerró en marzo una ronda de financiación de 250 millones de dólares, valorando la empresa en 1.600 millones de dólares.

 

Los participantes en la ronda fueron Dragoneer, Cobalt Capital, L Catterton, Sapphire Ventures y deportistas como Drew Brees, Larry Fitzgerald, Maria Sharapova, Mike Tyson y Sue Bird. El objetivo de la ronda era invertir en la comercialización de su producto entre los compradores para incrementar la visibilidad de la marca, aumentar su catálogo de clases online, e invertir en más operaciones para hacer frente al aumento de la demanda. Hasta la fecha, a través de varias rondas, Tonal ya ha levantado un total de 450 millones de dólares. 

 

 

 

 

 El mes pasado la empresa de china Fiture, cerró una ronda de 300 millones de dólares en la que entraron Sequoia Capital, Tencent, C Capital, Cathay Capital, Black Ant Capital, CPE (CITIC Industry Fund) y BAI (Bertelsmann Asia Investment Fund).

 

Fiture Magic Mirror, con sede en Shanghai, permite a los usuarios hacer ejercicio desde casa utilizando espejos inteligentes conectados capaces de transmitir cientos de clases de fitness y clases personalizadas. Fiture es parecido a Mirror, empresa que fue comprada por Lululemon en junio del año pasado por 500 millones de dólares. En este caso, además de vender los espejos, Mirror opera con un modelo de suscripción, cobrando 39 dólares al mes para acceder a sus clases en streaming.

 

Por otro lado, en diciembre del año pasado, Echelon, compañía dedicada a bicicletas estáticas y remos para entrenar en casa, levantó 65 millones de dólares en una ronda liderada por Goldman Sachs Growth en la que participó North Castle Partners, que ya figuraba en el capital de la empresa. En este caso, lo que distingue a Echelon del resto es el precio de sus líneas de productos, que comienzan a valores más bajos que la competencia, desde 500 dólares. Echelon multiplicó por seis sus ingresos en 2020, superando los 100 millones de dólares. Con esta ronda, Echelon pretendía llegar a una base de clientes más amplia y a más número de hogares que sus competidores.

 


 

 

En octubre del año pasado Icon Health & Fitness, compañía de equipos y software de fitness, levantó 200 millones de dólares en una ronda que fue liderada por el fondo L Catterton. Icon, propietaria de marcas como NordicTrack, ProForm y Freemotion, también tiene entre sus accionistas al fondo Pamplona Capital Management.  

 

Además, un mes antes, la plataforma Zwift para entrenar en rodillos, que destaca por su gamificación, levantó 450 millones en una ronda liderada por KKR, acompañada por otros nuevos inversionistas como Permira, el fondo de capital de riesgo de Specialized Bicycle Components, Zone 5 Ventures, y Amazon Alexa Fund, además de los existentes inversores como True, Highland Europe, Novator y Causeway Media. El objetivo de la ronda era acelerar el desarrollo de la plataforma e introducir en el mercado la maquinaria diseñada por Zwift.

 

 

 

 

En este contexto, España no se quedó al margen.  La start up española Volava, especializada en máquinas de entrenamiento para el hogar, fundada en 2017, culminó febrero una nueva ronda de financiación por valor de dos millones de euros. La ronda contó con aportaciones de fondos de venture capital españoles y estuvo liderada por Inveready, el fondo JME (propiedad de José Manuel Entrecanales) y el brazo inversor de Telefónica, Wayra.

 

El objetivo de la ronda era dar un paso más en la consolidación del crecimiento de su negocio y su expansión en el mercado nacional e internacional. La compañía cerró 2020 con una facturación de dos millones de euros y prevé alcanzar entre cinco y seis millones de euros en 2021. Volava, que comercializa su plataforma por suscripción, alcanzó el break even en noviembre del año pasado, pero a causa de sus planes de expansión volverá a situarse en números rojos. La empresa empezó a operar en noviembre de 2019.

 

Todas estas rondas se han producido mientras Peloton estaba firmando su escapada particular. La empresa registró una facturación de 1.262 millones de dólares en el tercer trimestre  de su ejercicio fiscal 2021 (finalizado en marzo), por lo que más que duplicó el negocio de 524,6 millones de dólares del mismo periodo del año pasado.La facturación acumulada en los nueve meses del año fue de 3.085 millones de dólares. El aumento de los ingresos se produjo por la inversión de la empresa para acelerar la velocidad de las entregas y por la fuerte demanda del home fitness que se mantiene por la pandemia. Pese a este crecimiento, la empresa no pudo evitar entrar en pérdidas en el tercer trimestre, con unos números rojos de 8,6 millones de dólares, frente a los 55,6 millones del año anterior, derivados de los planes de inversión de la compañía.