Fitness

Madrid libra a sus técnicos del ‘fitness’ de cumplir con la titulación exigida

Los empleados públicos de instalaciones deportivas con contrato indefinido serán habilitados automáticamente sin necesidad de acreditar el título exigido por ley.

Patricia López

27 jun 2017 - 05:00

 

Guiño de la Comunidad de Madrid a sus funcionarios de instalaciones deportivas. Acaba de entrar en vigor la nueva ley, que ordena el ejercicio de las profesiones del deporte con el fin de combatir el intrusismo y garantizar que los técnicos certifican la titulación requerida para ejercer. Sin embargo, el documento admite excepciones, puesto que libra a los funcionarios y al personal laboral de cumplir con la formación que sí exige al resto de entrenadores.

 

La norma, elaborada para regular las profesiones y los títulos académicos necesarios, contempla la “habilitación sin necesidad de trámite alguno a quienes en la fecha de su entrada en vigor hayan ingresado como funcionarios indefinidos y hayan accedido en las funciones específicas establecidas en las profesiones del deporte, aunque no reúnan los requisitos de titulación, diploma o certificaciones ahora exigidos”.

 

Los empleados públicos temporales también serán habilitados aunque tampoco cuenten con titulación, siempre que “acrediten una experiencia suficiente que garantice el desempeño de sus funciones cumpliendo las exigencias de calidad y seguridad para los usuarios”, según recoge el documento, aprobado con los votos favorables de Ciudadanos, Partido Popular (PP) y Podemos.

 

 

Esta decisión no es baladí, ya que la Comunidad de Madrid, y especialmente el Ayuntamiento de la capital, se caracterizan por gestionar de manera directa numerosos centros deportivos, lo que provoca que buena parte de la plantilla tenga la condición de personal laboral. “Los empleados interinos representan entre el 90% y el 95% de los trabajadores de los polideportivos”, indican fuentes del consistorio a Palco23. De ahí que en 2017 que el Ejecutivo municipal haya aprobado un presupuesto de 90,67 millones de euros para gastos de personal, lo que supone un 74,6% de inversión destinada a las instalaciones deportivas.

 

Desde el Ayuntamiento indican a este diario que, en su caso, a las instalaciones deportivas de gestión directa “no accede ningún profesional que no esté titulado y haya opositado”, por lo que, pese a la excepción de la ley, los empleados públicos deberían contar con la formación exigida aunque no tengan que acreditarla. Desde la Dirección General de Deportes del Ayuntamiento (DGD) de Madrid indican que “la habilitación será indefinida y automática en relación con los requisitos de ingreso del trabajador en la categoría para la que fueron contratados”.

 

 

De este modo, el nuevo marco legal cubre a los trabajadores contratados hace muchos años y cuyas titulaciones no coinciden con las existentes en la actualidad. “Es para ahorrar el trámite burocrático al personal laboral”, indican. En cambio, los empleados de instalaciones deportivas privadas o en régimen de concesión administrativa sí deberán presentar la titulación, diploma o certificaciones ahora exigido.

 

De ahí que las cadenas privadas y sus empleados estén en una situación diferente. De hecho, las compañías deberán hacer frente a sanciones económicas si su plantilla no cumple con los requisitos impuestos por la ley. Las infracciones leves serán castigadas con multas no superiores a 1.000 euros, mientras que las más graves acarrearán sanciones de entre 3.001 euros y 30.001 euros y la posible inhabilitación profesional de entre un año y dos años.

 

Los técnicos públicos piden ser funcionarios


La estructura de gestión de instalaciones deportivas públicas en Madrid dio un vuelco en 2005, cuando el Ayuntamiento entonces liderado por el PP absorbió el Instituto Municipal de Deporte (IMD) y lo convirtió en Dirección General de Deporte. En consecuencia, las 59 instalaciones deportivas que gestionaba el IMD pasaron a depender de las juntas municipales de cada distrito.

 

Esta situación provocó que los empleados de estos centros, que cumplían con la condición de personal laboral, solicitaran su incorporación a la plantilla del Ayuntamiento para pasar a ser funcionarios, una petición que no llegó a buen puerto. Con la llegada al gobierno municipal de Ahora Madrid, el ejecutivo de Manuela Carmena está tratando de “consolidar a los trabajadores laborales y convertirlos en funcionarios, lo que permitirá tener más seguridad porque contarán con una plaza fija”, indican.