Equipamiento

Todo al blanco del esquí: las estaciones buscan salvar el último remonte de la temporada

En el puente de San José y Semana Santa, las estaciones del país esperan salvar una pequeña parte de la facturación anual en un ejercicio para olvidar para el sector.

M. L-E.

17 mar 2021 - 04:51

 Todo al blanco del esquí: las estaciones buscan salvar el último remonte de la temporada

 

 

Todo al blanco. El esquí español se la vuelve a jugar. Con las comunidades autónomas con cierre perimetral pero sin restricciones entre provincias, el esquí español se centra ahora en el puente de San José y Semana Santa para  salvar las migas de la temporada tras un año en rojo del esquí. Sin embargo, el sector está pendiente de las futuras medidas que se puedan decretar por parte de la administración, por lo que vuelven a operar entre la incertidumbre.

 

Sierra Nevada ha sufrido una caída del 70% en afluencia de usuarios, mientras que para las estaciones de Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) esta cifra se ha situado en un 85%, aunque en estaciones como Port Ainé, Espot o Boí-Taüll el descenso de las ventas sólo ha sido del 60%.  Ahora es el turno de la remontada en las últimas semanas de la temporada que, en el mejor de los casos, los cuatro días de Semana Santa, suponen un 2,5% de la facturación anual, según el grupo catalán.

 

Para estas semanas, en las que la ocupación hotelera ha remontado, Sierra Nevada ha abierto todo su dominio esquiable y sus servicios y Baqueira Beret ha anunciado que lo ampliará hasta los 53 kilómetros. “El dominio esquiable disponible a partir del 18 de marzo con la apertura parcial de Bonaigua, que se sumará al área de Baqueira en funcionamiento durante todo el invierno”, informó la estación en un comunicado en el que remarcó que “la estación podría abrir más dominio esquiable de cara a Semana Santa” dependiendo de la meteorología y la evolución de la pandemia.

 

La habitual presencia en esta estación de esquiadores procedentes de Madrid hace que estas medidas tengan en cuenta los tres días festivos de esta semana en las Comunidades que celebran San José.

 

 

 

 

La aragonesa Astún, por su parte,  prevé duplicar el número de remontes hasta llegar a doce y ofrecer un dominio esquiable de 35 kilómetros en una comunidad autónoma en la que es la única opción para esquiar. “Acostumbrados a tan poca gente durante tantos días, el que vengan más esquiadores es una muy buena noticia, a pesar de que no se salven los números de la temporada”, explicó el subdirector general de Astún a Europa Press.

 

El Grupo Aramón, participado al 50% por el Gobierno de Aragón e Ibercaja, anunció que no abriría y que se centraría en la preparación de la temporada de verano y de la próxima campaña, “respetando los proyectos de inversión que tiene proyectados”. Candanchú tomó la misma decisión.

 

Por otro lado, Masella ha incorporado al dominio abierto el sector de Coma Oriola y, ahora, dispone de 52 kilómetros esquiables con nueve remontes. La misma estación reconoció hace unos días que “comienzan a moverse las reservas, pero hemos pasado días críticas” y que “ya se ha notado un poco más de presencia de gente” con los primeros días de movilidad en Cataluña, con presencia de grupos de estudiantes.

 

 

 

 

Si hace unos meses las estaciones temían perder el 30% de la facturación del año que suponía el Puente de Diciembre y Navidad, ahora el objetivo es poder salvar una mínima parte del negocio. Aunque el golpe ha sido distinto por regiones, la cifra de 118,75 millones de euros de facturación y 4,7 millones de visitantes de 2019-2020 será imposible de repetir, por lo que el sector está abocado a un año en números rojos y no hay que descartar que solicite algún rescate a la administración que, igualmente controla un 76% de las estaciones del país.

 

En Navidad, Sierra Nevada tuvo 83.360 esquiadores y 17.060 visitantes en la Navidad 2020-2021 a causa del aforo máximo, cifra que supuso 80.000 visitantes menos que la anterior. La Molina, por ejemplo, cerró la temporada 2019-2020 con 357.465 visitantes y la media de visitantes en Navidad, en sus mejores días fue de 924 personas, teniendo un 5% de la demanda habitual por la época. Y este año, hay que tener en cuenta que, con el buen tiempo, puede propiciar que el público vaya a la playa.

 

La situación es mucho peor para las estaciones de esquí de Italia y Francia que por orden gubernamental no han podido abrir este invierno. Si lo han hecho las de Austria y Suiza. En Andorra, por otra parte, la situación es delicada: las estaciones sólo pueden abrir para los residentes y los nacionales y Cataluña aún no ha integrado el país dentro de la zona de movilidad de sus ciudadanos por lo que, de momento, la frontera sólo está abierta por una causa de movilidad. Igualmente, Francia anunciará restricciones la semana que viene, por lo que también está expuesta a la decisión que tomen sus otros vecinos.