Adidas vuelve a reducir ventas en el tercer trimestre lastrada por la divisa

Adidas empieza a ver la luz al final del túnel. La compañía alemana ha cerrado el tercer trimestre con un descenso de las ventas del 6%, pero descontando los tipos de cambio ha anotado un alza del 1% tras varios trimestres estancada.

Teniendo en cuenta los tipos de cambio, la facturación del grupo se redujo un 6%, hasta 5.999 millones de euros. En el acumulado de los nueve primeros meses del año, los ingresos se contrajeron un 4% en euros. Si se descuenta el efecto divisa, al evolución fue plana.

La empresa destaca la buena evolución de modelos como Samba, Gazelle y Special, que están impulsando la división de lifestyle, pero también el impacto negativo de la suspensión del negocio en colaboración con la marca Yeezy, del rapero y productor Kanye West, que restó 450 millones de euros a las ventas en los nueve primeros meses.

En el primer trimestre, la marca no facturó nada, y en el segundo y el tercero, cuando se empezó a liquidar el stock existente, aportó 750 millones de euros en ventas. En los nueve primeros meses de 2022, la marca generó 1.200 millones de euros de facturación. Excluyendo este factor, la facturación de Adidas a tipos constantes creció un 3% en los nueve primeros meses del ejercicio.

Adidas siguió reduciendo su rentabilidad, pero se mantiene relativamente optimista

La rentabilidad de Adidas continuó sufriendo: la compañía redujo su margen bruto en 1,4 puntos en los nueve primeros meses, hasta el 48,4%, lastrada por la divisa y la actividad promocional. El resultado neto se situó en 343 millones de euros, muy por debajo de los 736 millones del mismo periodo del año anterior.  Una nota positiva es la evolución del inventario, que se ha reducido un 23 en el último año, hasta 4.849 millones de euros.

Adidas mantiene sus previsiones para el cierre del ejercicio, tras mejorarlas a mediados de octubre. La compañía anticipa un descenso de las ventas a un solo dígito bajo y un resultado operativo negativo de alrededor de cien millones de euros.

Entre los factores a favor, Adidas cita la buena salida del inventario de Yeezy, pero reconoce múltiples factores en contra como los persistentes desafíos macroeconómicos, tensiones geopolíticas, riesgos de recesión en Norteamérica y Europa y la incertidumbre en torno a la recuperación de China.

Adidas está liderada desde finales del año pasado por Bjørn Gulden, ex consejero delegado de Puma. Ambas empresas tienen un origen común: nacieron de la ruptura de los hermanos Adolf y Rudolf Dassler, que empezaron con un negocio conjunto de zapatillas. El primero fundaría Adidas y el segundo, Puma. Las dos mantienen su sede en la localidad alemana de Herzogenaurach.